Nuestra conciencia social se ha multiplicado y por eso buscamos viajar de forma más responsables. Especialmente cuando visitamos lugares como Marruecos, considerado uno de los países más sostenibles de África.
Desde hace unos años Marruecos apuesta fuertemente por impulsar un modelo de turismo más responsable. Gracias a ello presume hoy de un gran número de hoteles con “llave verde” y numerosas playas con Bandera Azul. Seguramente por eso, cuando viajamos a Marrakech, Essoauira, Chauen, o a cualquier otro de sus grandes destinos turísticos, nos gusta aportar nuestro granito de arena. Aquí van algunas ideas.
De la Ciudad blanca (Tanger) a la Ciudad azul (Chauen) en autobús
En general, moverse por Marruecos en transporte público —tren o autobús— es bastante sencillo y, sobre todo, muy económico. Es por eso que, si leíste sobre nuestras 13 razones para visitar el norte de Marruecos y te decides a ir, no tendrás mucho problema para organizar tu viaje. Te recomendamos especialmente ir desde Tánger hasta Chauen (o Chefchauen) con el autobús que sale de la Nouvelle Ville. También es especialmente bonito ver cómo al terminar el azul característico de Chauen empieza el verde y es que esta ciudad está rodeada de montañas, plantaciones y senderos por recorrer. Uno de ellos te llevará hasta el Parque de Talassemtane, visita obligada para ver cómo la naturaleza muestra todo su potencial, mientras sigues el cauce del río Rif y te pierdes en sus bosques.
Marrakech en bicicleta
Marruecos es un destino ideal para los que tienen claro que su mejor motor son sus piernas. Y qué mejor para ponerlas en marcha que una ruta en bicicleta por una de las ciudades más dinámicas del país, Marrakech. Cuando quieras un break de su bullicioso centro y descubrir su estilo de vida más allá de sus mercados, te recomendamos subirte al sillín y disfrutar de uno de los numerosos tours en bicicleta que ofrece esta ciudad. Una alternativa saludable para entender su cultura milenaria, descubrir sus principales monumentos en cada giro de manillar e incluso plantarnos en un abrir de ojos en uno de sus mejores ejemplos de turismo responsable, las Terres d’Amanar.
Esta reserva natural ofrece actividades para todos los gustos —deporte, cultura, artesanía, tradición, ocio— y cada una de ellas está ofrecida por los habitantes de esa misma región en la que siguen viviendo hasta 150 familias locales. Además, todos los productos que encontrarás allí son fruto de la colaboración entre cooperativas locales. En definitiva, reservar tu visita en las Terres d’Amanar es reservar también un lugar privilegiado desde el que aprender a amar y preservar el medio ambiente.
Essaouira, igualdad a través de un aceite sin igual
¿Conoces Essaouira (o Esauira)? Seguramente hayas oído hablar de su bonito frente marítimo pero esta ciudad costera también destaca por su promoción de la igualdad. La sociedad marroquí es muy tradicional y eso en ocasiones genera desigualdades que afectan especialmente a las mujeres. Por eso el gobierno marroquí ha puesto en marcha distintos programas de integración para ellas. Es aquí donde vale la pena detenernos en las cooperativas de aceite Argan, en las que todo el proceso de obtención de este valioso aceite lo realizan mujeres en riesgo de exclusión social. Ellas son también las encargadas de realizar visitas guiadas para descubrir todos los usos de los árboles de argán, que no son pocos.
Ecolodges, sinónimo de tranquilidad y paisajes espectaculares
Descubrir Marruecos de manera diferente, respetando el medio ambiente y el desarrollo sostenible; esto es lo que prometen los ecolodges que encontrarás del norte al sur de Marruecos. Repletos de detalles, muy cómodos, perfectos para disfrutar de la serenidad y de los impresionantes paisajes. Búscalos en la zona del Atlas y en el sur de Marruecos, en la ruta de los Kasbahs.
Como ves, Marruecos es un país que piensa en el medio ambiente y en las personas, así que ahora te toca a ti pensar por donde empezarás a descubrir este maravilloso país en tu próximo viaje. Puedes volar a Tánger para empezar por el norte o volar a Marrakech y subir desde el sur. Tanto monta, monta tanto.