Llevar una etiqueta identificativa en tu maleta es imprescindible, sobre todo cuando viajas en avión. ¿Pero sabes realmente qué datos debes incluir y cuáles no?

La famosa etiqueta identificativa de la maleta. Eso que nunca te acuerdas de poner en tus maletas y que, cuando llegas al mostrador de la aerolínea para facturar, todo son prisas. Las hay que vienen ya integradas en la propia maleta, las hay monísimas que venden en tiendas de accesorios de viaje… Da lo mismo cómo sea, todas valen siempre y cuando sean resistentes (irán arriba y abajo por el aeropuerto y es fácil que sufran un tirón en una cinta de transporte), te permitan incluir la información necesaria y, a ser posible, no dejen la información expuesta a simple vista (muchas llevan una solapa que tapa la información o van dobladas). Ahora bien, ¿cuál es esa información necesaria? Para eso lo primero es saber para qué sirve esa etiqueta, aparte de para adornar.

Por cierto, si buscas información sobre qué hacer en caso de que tu equipaje se retrase, te recomendamos leer este post.

• ¿Para qué sirve la etiqueta identificativa de la maleta?

En resumidas cuentas, sirve para que resulte más fácil identificar tu maleta en caso de que se pierda. Si se trata de una maleta facturada que se extravía durante un vuelo, necesitarás abrir una reclamación con la aerolínea y, de esta manera, cuando la localicen, podrán comprobar más fácilmente que es tu maleta porque los datos coinciden con los de la reclamación.

Si por lo que sea te dejaras tu maleta en algún lugar, también sería más fácil identificarla, aunque aquí es importante recordar otra cosa: no deberías perder nunca de vista tu equipaje en un aeropuerto, para evitar que alguien pueda manipularlo.

Otra utilidad que tienen estas etiquetas, sobre todo cuando son vistosas, es que te permiten identificar fácilmente tu maleta en la cinta de recogida. De paso evitas que otra persona se pueda confundir, ya que muchas maletas se parecen.

• ¿En qué maletas hay que colocar la etiqueta identificativa?

En todas las que viajen contigo, no solo en las que vayas a facturar. No lo creerás, pero más de uno y de una se ha olvidado su equipaje de mano en el aeropuerto —al ir al baño o al parar a comer algo, por ejemplo— o en el compartimento superior del avión. No es tan difícil despistarse un momento con los nervios del viaje y, si quieres tener más posibilidades de recuperar tu maleta, es mejor que se sepa de quién es.

• Sabiendo esto, ¿qué datos debe incluir la etiqueta identificativa de tu maleta?

Únicamente la información imprescindible para facilitar la identificación de tu maleta. Esto es:

• Tu nombre y apellido(s) completos, no solo las iniciales
• Tu número de teléfono móvil con el prefijo del país (el de España es +34)
• Tu dirección de email

¿Y qué datos NO debes incluir nunca?

• Una dirección física, ya sea de tu casa o de tu oficina
• El teléfono de tu casa

Opcional

• La dirección del hotel en el que te alojarás durante tu viaje (no si se trata de un apartamento sin recepción)

La razón para no incluir jamás una dirección física o el teléfono de casa es que estos datos le pueden permitir a cualquiera llegar hasta ti y, por tanto, son datos muy sensibles que no deberían compartirse alegremente. Si alguien necesita contactar contigo para devolverte tu equipaje, le bastará con poder llamarte o escribirte.

• ¿Qué pasa con las etiquetas de las maletas de los menores?

En este caso lo mejor es que los datos de contacto que figuren en la etiqueta sean los de la persona adulta que viaja con ellos, ya que a fin de cuentas será quién se preocupe de gestionar una incidencia si ocurriera.

• Un último consejo: haz fotos de tu maleta

Antes de cualquier viaje, es interesante que hagas fotos de tu maleta y también del contenido. Así, en caso de que se pierda, podrás incluir esta información en tu reclamación para facilitar la identificación.

Ahora que ya tienes tus maletas bien identificadas, ¡a volar! Recuerda que puedes consultar en la web toda la información sobre el equipaje que puedes llevar con Vueling.