A 30.000 pies por viajeros para viajeros

Resultados

Mucho más que playas: cultura y gastronomía en Menorca

Menorca es más que calas paradisíacas, pueblos de pescadores y senderos de ensueño frente al mar. La isla presume de una gastronomía de excepción y de una efervescente vida cultural durante todo el año.

+ info

Gazi. El barrio más trendy de Atenas

Lleno de vida, el barrio de Gazi (Γκάζι) es de los más animados de Atenas. Un lugar para tomar el pulso a la noche ateniense, en un laberinto de estrechas calles que se llenan de multitudes para disfrutar de su amplia oferta de ocio.

Fue el primer barrio en acoger locales de ambiente gay y, con el tiempo, se ha convertido en el lugar más trendy de Atenas, con una energía que no supera ninguna otra parte de la ciudad y que establece su propio ritmo.

En Gazi se alternan por igual los modernos bares de copas, pubs nocturnos, novedosos cafés y restaurantes, con museos, galerías y teatros. El epicentro de la vida del barrio gira entorno a una antigua fábrica de gas, que volvió a abrir en 1999 como un elegante espacio cultural bajo el nombre de Tecnópolis.

Gazi viene a significar precisamente eso, fábrica de gas y en esta renovada fábrica, ahora se organizan periódicamente exposiciones, conciertos y festivales. El complejo data de 1862 y lo forman varios edificios que albergan los espacios culturales, un gran patio, el Museo María Callas, la radio municipal y una agradable cafetería.

Debe ser de las pocas fábricas de gas que se mantuvieron en pie después de la segunda Guerra Mundial La razón es que se encuentra cerca de la Acrópolis y del yacimiento arqueológico de Keramikos y los nazis, grandes amantes de la cultura clásica, tenían miedo a dañarlos si bombardeaban la zona.

Al caer la noche, los tranquilos cafés de la Plaza de Gazi y sus calles aledañas, como Iakou, Persephonis, Dekeleon y Voutadon, se reconvierten en modernos bares y restaurantes.

Acércate hasta Mamaca's en la calle Persephonis. Es un clásico de la zona, en el que comer excelente comida griega. Y en la misma calle se encuentra The Butcher Shop, una excelente psistaria -típicas tabernas griegas especializadas en asados y carnes a la brasa-. Ambos restaurantes tienes mesas en las calles.

En Vitonos se encuentra Thalata, un restaurante especializado en marisco. Aunque un poco caro para los estándares griegos, su calidad es buenísima y no te sentirás como en el típico restaurante prefabricado de cartón piedra. Decorado con los bellos colores que caracterizan a las Cícladas, puedes dejarte aconsejar por las recomendaciones de sus propietarios para conseguir el producto más fresco.

En Athiri tienes un muy buen menú semanal, a base de platos gourmet, por unos 25€. El restaurante ha ganado algunos premios de cocina, por lo que es una apuesta segura...con productos frescos, aceite de oliva orgánico y postres caseros. Incluso el pan lo elaboran ellos mismos

Para tomar unas copas, Gazarte es de los lugares más concurridos. Tomar un cóctel en su azotea, con vistas a la Acrópolis, es de lo más refrescante. El complejo cuenta también un cine, un restaurante, la librería y una sala donde se organizan diariamente actuaciones de música en directo.

Dan ganas de ir verdad? Anímate! Consulta nuestros precios aquí!

+ info

Heroes: El Berlín de Bowie

David Bowie se mudó a la capital alemana buscando el anonimato en la atmósfera del Berlín de la Guerra Fría, totalmente interesado por la escena musical berlinesa de esa época con bandas como Tangerine Dream y Kraftwerk y con la firme intención de desintoxicarse.

"Low", "Heroes" y "Lodger" son los tres álbumes que forman la Trilogía de Berlín, tres trabajos clave en la discografía de David Bowie grabados en colaboración con Brian Eno en la década de 1970 y bañados por la influencia y el poder de una ciudad y una época únicos en la historia.

Para recorrer los lugares claves de la estancia de Bowie en la capital Berlinesa debemos empezar por la Hauptstraße 155, la dirección del edificio donde vivió el genio británico. Como curiosidad, hay que saber que su compañero de juergas y la también estrella del rock Iggy Pop compartió con él esta misma dirección, aunque pese a lo que muchos piensen, en distinto piso.

Bowie e Iggy frecuentaban la noche berlinesa con gran asiduidad. Uno de los locales más pisados por la pareja es precisamente nuestra siguiente parada: el café Neues Ufer. Antiguamente conocido como Anderes Ufer, este local es uno de los primeros bares de Europa de ambiente gay. De allí su nombre, que traducido significa “la otra orilla”.

Si nos movemos en metro por Berlín es parada obligatoria la estación de Neukölln. Os animamos a que tengáis un mp3 a mano para poder rendir tributo a la canción instrumental "Neuköln", que aparece en el álbum de 1977 "Heroes".

Tras el homenaje, podemos parar en la Potsdamer Platz, justo en el punto donde el Muro atraviesa la plaza. En la canción “Heroes” Bowie canta “I, I can remember, Standing, by the Wall, And the guns shot above our heads, And we kissed, as though nothing could fall” (“yo, yo puedo recordar, de pie junto al Muro, y las balas sobre las cabezas, y nos besamos como si nada pudiera caer”) Además de ser el lugar desde donde Bowie dice estar frente al muro, también esconde la historia de dos enamorados besándose. En su momento, Bowie dijo que era tan sólo inspiración, pero con el tiempo se pudo saber que se refería a una aventura que Tony Visconti, el guitarrista de Bowie, estaba teniendo con una de las coristas.

El lugar desde donde Bowie vio esa romántica escena de Visconti, fue nuestra siguiente parada: los Hansa Estudios. Lugar donde ambos pasaban horas experimentando lo que después se convertiría en una trilogía inigualable dentro de la historia de la música.

La última parada de nuestro recorrido termina frente a la Puerta de Brandeburgo, con una vista sobre la Plaza de la República. Esa plaza está al frente del Parlamento alemán, donde Bowie retornaría en 1987 para el Concierto para el Festival de Berlín.

Imagen de Jean-Luc Ourlin

Nosotros nos apuntamos, si quieres venirte consulta nuestros vuelos aquí.

+ info

Ciudatella en busca de un San Juan diferente

La noche del 23 al 24 de junio, conocida por ser la más corta del año, viene siempre acompañada por innumerables rituales y festividades en buena parte del territorio europeo. El fuego en forma de hogueras y de fuegos artificiales suele ser uno de los principales protagonistas de la misma, pero no el único. Entre las excepciones se encuentra el caso de Ciutadella, en Menorca, donde los caballos y sus jinetes toman el protagonismo en unas fiestas cuyos orígenes se remontan a principios del siglo XIV, y que en la actualidad atraen a multitud de curiosos en busca de nuevas experiencias.

Las fiestas de Sant Joan en Ciutadella tradicionalmente se reparten entre los días 23 y 24 de junio y el domingo anterior a estos días. El punto de partida lo pone el Diumenge des Be, en el que un payés vestido con pieles de cordero que carga un carnero blanco sobre sus hombros, y al que se le conoce como s’homo des be (el hombre del cordero), recorre descalzo las calles de la ciudad. Su figura vendría a representar a la de San Juan Bautista y es la encargada de anunciar el principio de la celebración de esta festividad.

El segundo momento fuerte de las fiestas de Sant Joan de Ciutadella tienen lugar desde el 23 de junio a la 14 horas hasta el alba del 25 de junio, ¡ahí es nada! ¿Y qué se encontrará el visitante durante estos días? Pues sus famosas cabalgatas (qualcades en menorquín) que protagonizan por un lado los cavallers, en los que aparece representada la población campesina, y por otro lado los caixers, que simbolizarían los cuatro estamentos sociales: la iglesia por el Caixer Capellà o Capellana; la nobleza por el Caixer Senyor; los artesanos por el Caixer Casat (casado y el maestro de un oficio manual) y el Caixer Fadrí (el aprendiz); y los payeses por los Caixers Pagesos. Guiando a todo el conjunto están el fabioler, montado sobre la somereta (un asno), que al son de las notas de su flauta y del tambor anuncia la llegada de toda la comitiva. Toda esta cabalgata no deja de ser una romería en la que se acompaña al santo desde la plaza del Born hasta la pequeña ermita de Sant Joan de Missa.

Otro de los actos de estas fiestas al que no debes faltar es al Caragol des Born, que tiene lugar el 23 de junio por la tarde y en el que los caballos montados por sus jinetes dan vueltas alrededor de la plaza del Born al son de la música rodeados por toda la multitud. El otro plato fuerte de esta celebración son los Jons des Pla, que tienen lugar el 24 de junio a partir de las 19 horas -se recomienda estar con bastante tiempo de antelación en el Pla de Sant Joan para poder coger sitio-, y en los que se suceden una serie de juegos medievales ecuestres en los que se pone a prueba la pericia de los jinetes con sus caballos.

Y sí, como buenas fiestas menorquinas, no deben faltar el combinado por excelencia de la isla, el gin amb llimonada, una fantástica mezcla de gin de la zona con granizado con limón que te recomendamos beber con moderación. Y no, no la llaméis pomada sino queréis que los lugareños os miren mal.

En el caso de que no llegues a tiempo para las fiestas de Sant Joan en Ciutadella, a lo largo del verano se suceden las diferentes fiestas mayores de las poblaciones de la isla, en las que los caballos también están presentes y la diversión está asegurada.

Anímate a vivir estas fiestas en primera persona, reserva tu Vueling aquí.

Texto de Los Viajes de ISABELYLUIS

Imágenes de Morfheos

 

+ info