Un paseo por la bella Amberes
Situada a 50 kilómetros de Bruselas, Amberes en uno de esos lugares de parada obligatoria si te aventuras a recorrer tierras flamencas. En ella encontrarás todos los ingredientes para disfrutar de una magnífica escapada: desde calles repletas de moda, a un magnífico centro histórico con hermosos edificios, pasando por la casa-museo de Rubens, y rematando la jugada recorriendo el barrio donde se concentra el 85% de comercio mundial de diamantes. No está nada mal, ¿no?
Una de las mejores formas de “dejarse caer” en esta ciudad es en tren, ya que con él la primera en recibirte será su espectacular Estación Central. Construida entre 1895 y 1905, cuenta con un imponente y amplio edificio coronado con una inmensa cúpula, y decorado con una veintena de tipos de mármol, por lo que también es conocida como el templo de mármol. No en vano, está considerada como una de las estaciones de ferrocarril más bellas del mundo.
Tras este espléndido recibimiento, lo mejor es dirigirse hacia su centro histórico en busca de las huellas que han quedado de su espléndido pasado. De imprescindible vista es suPlaza Mayor(Grote Markt), enmarcada por edificios gremiales de los siglos XVI y XVII, de entre los que destaca el Ayuntamiento de Amberes. Justo en el centro de la plaza se encuentra uno de los iconos de Amberes: la fuente de Silvio Brabo. Realizada en de bronce en 1887, su temática hace referencia a los orígenes de la ciudad. Según cuenta la leyenda, un gigante llamado Druoon Antigoon custodiaba el río Escalda, que cobraba un peaje a todos barcos que quisieran pasar, cortando la mano y arrojándola al río a todo aquel capitán que se negase a pagar. Un día el centurión romano Silvio Brabo, cansado de la situación, cortó la mano del gigante y la tiró al río, dando origen al nombre de la ciudad: Antwerpen (Ant= Mano, Werpen= Lanzar). No es de extrañar que uno de los dulces típicos de Amberes, los handjes, tengan forma de mano, en recuerdo a esta leyenda.
Siguiendo por nuestro paseo por el centro, te recomendamos detenerte en la Catedral, en cuyo interior encontrarás una de las obras maestras de Rubens, el Descendimiento de la Cruz. Otro lugar de recomendada visita es la iglesia de Santiago, de estilo gótico, y que forma parte del Camino de Santiago desde los Países Bajos.
Otro de los platos fuertes que encontrarás en Amberes es la casa de Rubens (Rubenshuis), en la que residió durante los últimos 29 años de su vida. En la actualidad ha sido transformada en museo, en el que podrás hacerte una idea de cómo vivía y trabajaba este genial pintor, que fue uno de los favoritos del rey Felipe IV de España, y principal cliente.
Entre las curiosidades con las que cuenta la ciudad, y por lo que es conocida a nivel mundial (con el permiso de su puerto, que es uno de los más importantes de Europa) es por su relevante papel en el comercio de diamantes. Las cifras hablan por si solas: en Amberes se comercializa el 40 % del diamante industrial, más del 85 % del diamante en bruto y el 50 % del diamante pulido. Ahí es nada. El barrio donde se llevan a cabo todas estas transacciones está situado al sur de la Estación Central, y en él se puede visitar el Museo del Diamante, donde podrás tus ampliar tus conocimientos sobre este lujoso y apreciado mineral.
Más variedad de bolsillos permite la calle Meir, la zona comercial por excelencia de la ciudad, donde encontrarás todo tipo de marcas emplazadas en bellos palacios de los siglos XVIII y XIX. La moda y el diseño ocupan un importante lugar en Amberes, así que no dudes en acercarte hasta la Nationalestraat, donde se encuentra el MoMu, el Museo de la Moda.
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Texto de Los Viajes de ISABELYLUIS
Imágenes de tom hartley
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Vacaciones de invierno a los pies del Mont Blanc
Chamonix, estrella absoluta de los Alpes franceses, es el lugar perfecto para una escapada invernal en la que disfrutar al máximo de la nieve de todas las maneras posibles, con unas vistas más que privilegiadas al monte más elevado de Europa, el Mont Blanc. Situado a apenas 16 kilómetros de Suiza y 11 kilómetros de Italia, es un destino que reúne a gente venida de todas partes con ganas de practicar deportes de nieve, hacer excursiones por sus espléndidos parajes naturales, relajarse en un spa, e incluso ir de compras en la pequeña ciudad de Chamonix.
Las mejores pistas negras de Francia
En Chamonix todos aquellos aficionados a los deportes de nieve encontrarán un auténtico paraíso por el que deslizarse con unas espectaculares vistas, ya sea al Mont Blanc o ya sea al valle donde se encuentra ubicado Chamonix. Los 115 kilómetros de pistas, con 12 para principiantes, 26 azules, 20 rojas y 12 negras, harán las delicias de todo aficionado al esquí o al snowboard. Aunque destaca por contar con un elevado número de pistas de alta dificultad aptas solo para los más intrépidos, también cuenta con espacios donde los más pequeños o los que están en fase de aprendizaje puedan también disfrutar de estos deportes de nieve.
La Aiguille du Midi, con una altitud de 3.842 metros, es el objetivo favorito de los menos temerosos a las alturas y de los buscadores de bajadas de altísima envergadura solo aptas para auténticos expertos en la materia. Y es que solo por la estupenda panorámica que hay desde aquí a los Alpes franceses, italianos y suizos merece la pena subirse al teleférico y vencer al vértigo. Más accesibles son las pistas de Brévent-Flégère que también cuentan con unas magníficas vistas al Mont Blanc.
Paisajes de vértigo
Los menos deportistas podéis estar tranquilos, ya que no es necesario esquiar para disfrutar de las vistas, a las que se puede acceder desde cómodos teleféricos. El Mont Blanc, con sus apabullantes 4810 metros de altura, y conocido por ser la cuna del alpinismo, es el principal foco de atención de todos los que se desplazan hasta aquí. Como ya hemos indicado en el punto anterior, Aiguille du Midi, y el pico de Le Brévent son perfectos miradores para su contemplación. Otras panorámicas a tener en cuenta en la zona son las proporcionadas por los glaciares allí presentes. Destaca el Mer de Glace, situado en la ladera norte del Mont Blanc, con 7 kilómetros de largo y 200 metros de profundidad, que lo convierten en el más largo de Francia.
Après ski de lujo
Tras una larga jornada de esquí o de recorrer la zona en busca de sensaciones, Chamonix, a diferencia de otras estaciones alpinas que solo cuentan con pequeños pueblos con una oferta muy limitada para el après sky, aquí encontrarás una pequeña ciudad repleta de servicios con los que rematar el día. Podrás desde ir de compras, a tomar unas copas acompañadas de música en directo, pasando por reponer energías probando clásicos de la gastronomía de la región de la Saboya, como la raclette o la fondue de queso. ¿Se puede pedir más?
Reserva tu Vueling a Ginebra, que está a tan solo 88 kilómetros de Chamonix, y aprovecha para darte una alta dosis de nieve ante la cumbre más elevada de Europa.
Texto de Los Viajes de ISABELYLUIS
Imágenes de Christian Bertram
+ infoLovainajovenyflamenca
Lovaina, considerada la Salamanca de Flandes por la gran cantidad de estudiantes que residen en ella durante la temporada universitaria, es una ciudad ideal para ser descubierta durante una escapada a Bruselas, ya que se encuentra a menos de media hora en tren de ésta.
Lovaina y los universitarios
En Lovaina, en neerlandés Leuven y en francés Louvain, la universidad tiene un gran peso ya que no solo es una institución histórica (nació en el año 1425) sino que cada año reúne a un gran número de estudiantes extranjeros que vienen aquí con una beca Erasmus. En este sentido, muchos de ellos no saben que el propio Erasmo de Rotterdam, del que toma nombre este programa de intercambio casi treintañero, impartió clases en la Universidad de Lovaina.
No es de extrañar entonces que, cada inicio de curso, la población de esta ciudad de Flandes aumente en casi 20.000 jóvenes que, estudian de día, y de noche se van de picos pardos para convertir Lovaina en uno de los lugares más divertidos de Europa. Muchos de estos estudiantes se congregan, haga frío o calor, en la Oude Mark, una plaza que está atestada de cafés, pubs y restaurantes que forman la considerada barra de bar más larga de Europa.
Durante las mañanas muchos de estos estudiantes redimen los pecados de la noche anterior en la biblioteca, ubicada en la plaza Monseigneur Ladeuzeplein. Este edificio, que antes estaba en la calle Naamsestraat, fue destruido durante la Primera Guerra Mundial y reedificado con dinero norteamericano y belga. En esta misma plaza se encuentra uno de los símbolos modernos de Lovaina: un gran escarabajo atravesado por una aguja gigante de tres metros de altura, inaugurado en el año 2005 con motivo del 575 aniversario de la Universidad.
Patrimonio histórico de Lovaina
Lovaina, capital de la provincia del Brabante Flamenco, tiene en su Grote Markt o Plaza Mayor, algunos de los edificios más emblemáticos de la ciudad. Destaca sobremanera el impresionante Ayuntamiento, ejemplo de gótico brabantino de mediados del siglo XV y en cuya fachada se pueden ver más de 230 pequeñas esculturas. Mención aparte merecen la iglesia de San Pedro, con un bajo campanario inacabado, y el edificio neoclásico de la Mesa Redonda (Tafelrond), que acoge en la actualidad la sede central del Banco Nacional. Siguiendo la calle Bondgenotenlaan desde la Grote Mark se llega a una plaza de marcado acento español, la Martelarenplein (Plaza de los Mártires) cuya reforma la hizo entre 1998 y 2004 el arquitecto Manuel de Solà-Morales.
Al igual que la ciudad de Malinas, Lovaina cuenta con un magnífico Beaterio Mayor, del siglo XIII, un lugar recoleto que está a un cuarto de hora a pie del centro, y en el que vivían las beguinas (beatas), unas religiosas que decidían llevar una vida austera. Con seis hectáreas de superficie, el Beaterio Mayor es hoy residencia de muchos profesores de intercambio y estudiantes con beca Erasmus. Cabe recordar que los beaterios flamencos son Patrimonio Universal por la UNESCO.
Otros lugares de gran interés son la abadía de Gertrudis, la iglesia de San Miguel, obra maestra del barroco flamenco, y la fuente de la sabiduría (Fons Sapientiae), del artista belga Jef Claerhout, a la que es habitual verla vestida con diferentes trajes según la época del año
Gastronomía y cerveza en Lovaina
En Lovaina la cerveza es un must y por este motivo se pueden hacer varias rutas relacionadas con esta bebida, como un recorrido por la Cervecería Domus o por la fábrica de Stella Artois, la más conocida de esta ciudad. Además, hay algunos restaurantes que ofrecen menús maridados con cerveza local. Dos de estos son el Zarza y el Essenciel, este último situado en la concurrida calle Muntstraat.
Ahora que ya tienes las claves para desenvolverte por Lovaina, coge tu Vueling a Bruselas y acércate para disfrutarla.
Texto de María Jesús Torné de tusdestinos.net
Imágenes de Toerisme Leuven, Frédéric Van Hoof, milo-profi.be
+ infoDisfrutando de la primavera holandesa
El tulipán, junto con los zuecos, los molinos de viento y las bicicletas, es uno de los símbolos que va indisolublemente asociado a la imagen de Holanda. Este bulbo, cuyo origen se encuentra en Anatolia y Oriente Medio, llegó a Europa en el siglo XVI causando gran admiración, sobre todo en los Países Bajos, llegando a provocar un siglo después un fenómeno que pasó a denominarse como la tulipomanía. Fruto de ella fue la transformación de esta flor en un auténtico objeto de culto, por el que se pagarían elevadísimos precios, y que acabaría cotizando bolsa, llegando a provocar en 1637 la que se conoce como la primera gran burbuja financiera de la historia, debido a la elevada especulación generada en torno a este producto.
En la actualidad el tulipán inunda cada primavera el paisaje holandés, transformándolo en una auténtica explosión de color por el que bien merece la pena hacer una escapada a Holanda. Para aquellos que quieran disfrutar al máximo de esta preciosa flor, hemos seleccionados algunos de los lugares que no deben de faltar en tu lista.
Keukenhof, el parque de los más de 7 millones de bulbos florales
Keukenhof se encuentra situado en Lisse, entre Ámsterdam y La Haya, en pleno centro de la conocida como la región de los bulbos. Aquí hallarás la increíble cantidad de más 7 millones de bulbos florales con los que dejarte seducir, siendo un lugar de imprescindible visita para los amantes de esta flor y de la naturaleza en general. Ahora bien, Keukenhof no solo es conocido por el elevado volumen de flores que alberga, sino también por su bello diseño, que cuenta con lagos, fuentes, paseos y molinos, formado un conjunto asombrosamente embriagador. La única pega es que este maravilloso jardín solo está abierto en época de floración del tulipán, es decir, entre mediados de marzo y finales de mayo, y debido a la amplia afluencia de público, es recomendable reservar con bastante antelación.
De ruta por Bollenstreek, la región de los bulbos
La conocida como la región de los bulbos (Bollenstreek en holandés) es otro de esos lugares que no debes dejar de recorrer en época primaveral. Situada a 30 kilómetros al suroeste de Ámsterdam, entre Haarlem y Leiden, comprende una área caracterizada por la presencia de tierra arcillosa a la que si le añadimos el clima marítimo de la zona obtenemos el espacio perfecto para el cultivo de los tulipanes y otras plantas bulbosas como los crocos, los narcisos y los jacintos. La mejor época del año para dejarse caer por esta zona es el mes de abril, que es el momento de máximo esplendor de los tulipanes. Recorrer estas tierras, ya sea en coche o en bicicleta -existen tours organizados desde Ámsterdam que hacen un circuito bastante completo por las localidades que conforman el Bollenstreek -, es un auténtico placer para el sentido de vista, en el que se suceden campos y campos de tulipanes en todas sus formas y colores y que dejarán al visitante absolutamente obnubilado.
Museo del Tulipán
Si eres de esos que quiere conocer todos los intríngulis y la historia que encierra este popular y apreciado bulbo, entonces no debes marcharte de Holanda sin antes visitar el Museo del Tulipán de Ámsterdam. Ubicado en el barrio de Jordaan, muy cerca de la casa-museo de Ana Frank, en él podrás aprender toda la apasionante historia que se esconde tras esta preciosa flor.
Reserva tu Vueling a Ámsterdam y anímate a disfrutar de la primavera holandesa.
Texto de Los Viajes de ISABELYLUIS
Fotos de Robert Lyle Bolton
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