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4 fondos marinos que nunca olvidarás

El 8 de junio se celebra el Día Mundial de los Océanos, una efeméride que sirve para recordar el papel vital que tienen en nuestra vida, más allá de su belleza. Son los pulmones de nuestro planeta porque de ellos sale la mayor parte del oxígeno que respiramos y son fuente de alimentos y medicinas. Con motivo de esta fecha tan señalada, repasamos aquí cuatro fondos marinos de Europa que quitan el hipo.

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4 restaurantes con estrella en Mónaco que cualquier gourmet debería probar

Si está entre tus planes visitar la Costa Azul francesa, no olvides hacer una parada en Mónaco. En esta pequeña roca el lujo también llega a la mesa, ya que se concentran un sinfín de restaurantes estrellados. Estas son nuestras direcciones favoritas.

Restaurante Joël Robuchon Montecarlo

Enfundaos en vuestras mejores galas y poned rumbo al restaurante Joël Robuchon de Montecarlo. Inaugurado en el año 2004, fue el primer establecimiento abierto por el chef francés en el Principado al que siguieron los no menos famosos Yoshi (cocina japonesa) y Odyssey (cocina mediterránea). Por su parte, el Restaurante Joël Robuchon Montecarlo,de estética moderna y acogedora, transmite una sensación de refinamiento zen. La cocina abierta y a la vista permite a los comensales apreciar la coreografía de los chefs y pasteleros que ejecutan su arte ante los fogones. Toda una experiencia gastronómica del más alto nivel. También hay que saber que el conocido chef francés ha integrado en su carta un menú sin gluten y otro vegetariano para poder hacer disfrutar incluso a los paladares más sensibles.

Le Vistamar

Si además de una buena mesa quieres disfrutar de una de las mejores vistas de Montecarlo, decántate por Le Vistamar (en el espléndido Hôtel Hermitage Montecarlo), donde el chef Benoît Witzorquesta un concepto gastronómico galardonado con una estrella Michelin. Aquí el enfoque es exaltar los productos con los mejores sabores del Mediterráneo y los platos, deliciosamente originales, responden a la temática “un pescado, una verdura y una cocción” en el marco de diferentes opciones del menú degustación. Una perfecta armonía entre sofisticación y simplicidad. Cabe destacar también la auténtica estrella de la casa: la langosta azul servida con guisantes, cebollitas caramelizadas y una fina espuma infusionada con pato ahumado. Para acompañar el menú, nada como el maridaje que propone el establecimiento con su impresionante bodega de exclusivas referencias del mundo. De lo mejorcito de Mónaco. 

 Le Louis XV - Alain Ducasse

Le Louis XV, del renombrado chef francés Alain Ducasse, es un mundo fantástico de moderna elegancia que se ubica en el Hotel París de Montecarlo. Y, según los mejores críticos internacionales, un restaurante que ha alcanzado la perfección culinaria. El interiorismo (en el que fascina una impresionante lámpara araña elaborada a mano con más de 800 piezas de cristal únicas) es una demostración de lujo exquisito que rinde tributo a la ‘dolce vita’ de La Rivera, un lugar para el que Ducasse siempre ha expresado su pasión. Y reitera este homenaje a través de su cocina, en la que productos, sabores y colores de la Costa Azul se dan cita. Los pescados son de la lonja, y las hierbas, especias y verduras de la huerta de proximidad y temporada. Esta tradición en el producto viene contrapuesta con una técnica que brinda modernidad y frescura en el plato.

Elsa

Sabores contemporáneos de la Costa Azul elaborados con productos locales y de temporada (la carta cambia cada temporada) pero, sobre todo, ecológicos, lo que ha valido a este establecimiento convertirse en el primero certificado como 100% bio por la normativa europea. Con una estrella en la Guía Michelin, el restaurante Elsa forma parte de la élite gastronómica gracias al talento y creatividad del chef Paolo Sari. Hay tres menús degustación diferentes. 

Reserva tu Vueling a Niza, que se encuentra a apenas media hora de Mónaco, y anímate a sacar tu vena gourmet en alguno de estos excelentes restaurantes.

Texto de Laia Zieger de Gastronomistas.com

 

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Cannes cine y mucho más

Cine, glamour y lujo bien podrían definir esta maravillosa ciudad de la Ribera Francesa. Y es que es pronunciar el nombre de Cannes y venirnos a la mente uno de sus momentos más mediáticos del año, como lo es su festival de cine, en el se viste con sus mejores galas y se puebla con los rostros más famosos del séptimo arte y con más de unasocialité dispuesta a no perderse tan digno espectáculo. Pero no solo de cine vive el hombre, y en Cannes hay mucho más que estrellas cinematográficas y millonarios con los que dejarse embelesar. Te animamos a conocer las dos facetas de esta fantástica ciudad.    

Un must de rigor, pasear por la Promenade de la Croisette

Este bulevar, que antiguamente era conocido como le chemin de la petite croix (el camino de la pequeña cruz) ya que en él había (y sigue habiendo) una pequeña cruz, bien podría ser rebautizado como el bulevar de las Estrellas. Repleto de tiendas de alta costura, restaurantes de lujo y de fantásticos hoteles, y poblado por todo tipo de famosos, es el lugar perfecto para dar un paseo y dejarse llevar por el brillo de todo lo que en él acontece. En su recorrido te cruzarás con icónicos hoteles como el InterContinental Carlton, en un elegante palacio de 1911, el Martínez, de estilo art déco o el Majestic, hasta alcanzar otro lugar mítico como es el Palacio de Festivales y de Congresos. Sí, como bien habrás podido adivinar, en este espacio se da cita cada año el Festival de Cine de Cannes. Aquellos que sientan curiosidad por conocer las instalaciones en las que se desarrolla tan magnánimo evento pueden saciarla reservando un tour guiado por su interior. Otro clásico de la Croisette es el Chemin des Etoiles, que se encuentra situado frente al Palacio de Festivales y de Congresos, y en el que se pueden ver los moldes de las manos de numerosos actores, directores, y gente del mundo del cine.

Además de todo lo dicho anteriormente, no debes de olvidar que este bulevar está ubicado frente al mar, así que no dudes en volver la vista hacia sus playas y deleitarte con la panorámica que hay desde aquí de la bahía, te aseguramos que merece la pena. Eso sí, te avanzamos que la mayor parte de las playas que encontrarás en este bulevar son privadas, o mejor dicho, están ocupadas por las tumbonas de los hoteles de lujo, que esos sí, se pueden alquilar. Cerca del Palacio de Festivales y Congresos hay una pequeña playa de acceso público.

Descubrir el “otro Cannes” en el Vieux Port yLe Suquet

Como ya avanzábamos en la introducción, más allá del Cannes cinematográfico hay cosas por ver y con las que dejarse sorprender, aunque en una dimensión mucho menos opulenta. Para ello hay que acercarse hasta el Vieux Port, donde además de grandes yates de lujo nos cruzaremos con los lugareños realizando las tareas propias de su día a día. Desde aquí te recomendamos que te adentres en Le Suquet, el barrio antiguo de la ciudad, en el que imperan las callejuelas y las plazas llenas de encanto. Una de las mejores vistas de Cannes se encuentra en esta zona, en el museo de la Castre, situado en la plaza de la Castre. Seguro que no te arrepentirás del ascenso cuando tengas ante a ti la panorámica de la Croisette y del Palacio de Festivales.

Reserva tu Vueling a Niza, que se encuentra a 33 kilómetros de Cannes, y aventúrate a descubrir una de las ciudades más glamurosas del Mediterráneo.

Texto de Los Viajes de ISABELYLUIS

Imágenes de Daniel70mi Falciola

 

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Pau el balcón de los Pirineos

Los ingleses descubrieron Pau a mediados del siglo XIX, se enamoraron de las bondades de su clima y lo convirtieron en uno de sus lugares preferidos de veraneo. Prueba de ellos es que aquí se conserva el campo de golf más antiguo de Europa fuera de las islas británicas. La capital del departamento de los Pirineos Atlánticos, denominada ciudad de arte e historia, ofrece a sus visitantes grandes dosis de historia, gastronomía y vinos de los buenos, además de adrenalina a tope gracias a los deportes acuáticos que se pueden practicar en el Estadio de Aguas Bravas Pau-Pyrénées.

Pau, ciudad con historia

El casco histórico de Pau se vertebra alrededor de su castillo donde nació el buen rey Enrique IV de Francia (y III de Navarra), el primer monarca Borbón del país. Esta construcción se caracteriza por su diversidad arquitectónica y, como todos los Museos Nacionales de Francia, la visita es gratuita el primer domingo de cada mes. Frente al Castillo de Pau se encuentra el Parlamento de Navarra creado a mediados del siglo XVII tras el edicto de unión entre la región histórica de Bearne y Francia. Hoy es la sede del Consejo General de los Pirineos-Atlánticos.

Además, en el núcleo antiguo de la ciudad se pueden visitar algunos de sus edificios más emblemáticos como la iglesia de Saint-Martin o el Palacete Sully, una mansión del siglo XVII. Se dice que da buena suerte tocar la aldaba de su puerta por lo que, por si acaso, no hay que marcharse de esta ciudad sin hacer este ritual.

El Bulevar de los Pirineos, un balcón a la naturaleza

Uno de los lugares más emblemáticos de Pau es el Bulevar de los Pirineos, diseñado como una réplica de la Promenade des Anglais de Niza, que conecta el castillo con el Palacio Beaumont y desde el cual se tiene una vista privilegiada de la cordillera que separa Francia y España. Cuando llega el buen tiempo una actividad que les encanta a sus habitantes y, por extensión, a muchos de sus visitantes es sentarse en las terrazas de los cafés y contemplar la fabulosa vista a las montañas.

En Pau se pueden visitar varios museos de los que destacaremos dos: la Casa Bernadotte, donde nació Jean-Baptiste Bernadotte, militar francés que llegó al trono de Suecia, y el Museo de las Bellas Artes, que alberga una colección de pinturas de Victor Galos y de otros artistas locales además de obras de Degas o Rubens.

Gastronomía y deportes en Pau

La gastronomía pirenaica en la que despuntan embutidos contundentes y quesos sabrosos es otro de los grandes atractivos de la capital de los Pirineos Atlánticos. Un plato muy popular es La Poule au Pot (gallina al puchero) que simboliza la cocina tradicional bearnesa. Entre los vinos el que más destaca es el de Jurançon, con dos modalidades: la seca y la dulce. Por último, para quemar las calorías ingeridas es más que recomendable la práctica de algún deporte de aventura como el rafting o el hidrospeed en el cercano Estadio de Aguas Bravas que en 2017 acogerá los Campeonatos del Mundo de Canoa-Kayak.

No dudes en acercarte a esta bella ciudad, consulta tu vuelo aquí.

Texto de Tus Destinos

Imágenes de Jean Jacques BROCHARD, Alban GILBERT

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