Las mejores tapas de A Coruña
El Concurso de Tapas Picadillo es uno de los de mayor fama de todo el norte de España. En A Coruña se vuelca toda la ciudad, y buena parte de sus establecimientos gastronómicos participan con sus mejores creaciones. La organización agrupó a los participantes en algunas zonas de la ciudad. A continuación os hablamos de algunos de los bocados que más nos sorprendieron. Puesto que los participantes fueron más de 70 hemos hecho una selección entorno a las zonas más cercanas al centro histórico de la ciudad. ¡Ah!, que sepas que aunque el concurso acabó, todas las tapas pueden ser degustadas hasta el 31 de diciembre. Puedes consultar los ganadores de este año en la web del concurso.
Zona Ciudad Vieja, Monte Alto, Zalaeta y Plaza de España
El primer asentamiento de A Coruña es lo que hoy se denomina "Ciudad Vieja", una zona que acoge los monumentos anteriores al siglo XIX. La quietud de sus calles de piedra, hacen de esta zona un lugar perfecto para pasear. Nada mejor para empezar la ruta que hacerlo junto a los Jardines de San Carlos. Allí está A Boca do Lobo, un bar en el que podrás probar sus dos tapas especiales para el concurso. Por un lado la creativa a base de pulpo gallego a 100º, coulis de algas y croqueta líquida en corteza de cerdo, y por otro la tradicional papada de porco celta asada y patatitas en su jugo. Lindando con la Ciudad Vieja se abre la Plaza de María Pita, un conjunto de gran armonía que se estructura en torno a la estatua de la heroína local, que luchó contra los corsarios ingleses. La Plaza está rodeada por edificios con soportales, en los que se ubican algunos de los principales restaurantes y bares de la ciudad, como Breen’s Tavern que ofrece una espectacular brandada de bacalao y langostinos. Justo al lado, El Ángel Café Bar (Plaza María Pita, 25) concursó con sus sorpresivos Saquitos celtas. Mientras que El Tequeño se aventuró con su tapa creativa Melgacho a base de cola de Pintarroja (pequeño tiburón).
Zona Barrera, La Marina, Galera, Estrella, Olmos…
Son las calles neurálgicas del tapeo coruñés, también conocidas como el barrio de la Pescadería, y las que concentran el mayor número de establecimientos. Partiendo del lateral de la Plaza de María Pita, la Calle Franxa ofrece desde marisquerías hasta restaurantes cubanos o turcos, pasando por tradicionales tascas, cervecerías, jamonerías y bodegas. Si vamos de la Ciudad Vieja hacia Los Cantones pasaremos por una zona que está minada de bares y restaurantes. Pero sin duda donde encontraremos una mayor concentración es en la calle Barrera, donde hay ni más ni menos que trece participantes en el concurso. Como A Casa da Moura (Barrera, 9), que deleita con su Ovo da Moura, o Alma Negra (Barrera, 13), y su tapa creativa Taco de caballa, junto a su apuesta más tradicional, llamada Mar y montaña de tendones y callos de bacalao.Aunque nosotros nos quedamos con el espectacular Tartar de zamburiñas y aguacate sobre cama de brotes tiernos y brotes de col morada que ofrece Tapa Negra. La calle de la Galera, que nos llevará hasta la Calle Olmos, mantiene algunos de los establecimientos clásicos del tapeo coruñés, que concentran a sus puertas distintas generaciones.
Zona Alameda, Plaza de Galicia, Plaza de Vigo, Juan Flórez…
En torno a estas dos plazas se estructura otra importante zona de tapeo de la ciudad. En pleno barrio del Ensanche, se trata de una importante área comercial y de negocio, en la que se agrupa un buen número de tiendas y oficinas, pero también tabernas y restaurantes. Forma parte del conocido como Distrito Picasso, una zona que abarca el espacio comprendido entre Juana de Vega y Plaza de Mina, y que debe su nombre al pintor malagueño, que estudió y vivió unos años en esta parte de A Coruña. En su área de influencia se encuentran calles tan conocidas como Juan Flórez, Linares Rivas o Ramón de la Sagra.
La zona por la que anduvimos va de Los Cantones hacia el Parque de Santa Margarita, para luego, coger la calle de Juan Florez hacia la Avenida de Rubine que nos llevó al estadio de fútbol de Riazor. Para empezar, cerca de la Plaza de Pontevedra, tienes que probar la Empanada de xoubas y grelos que preparan en Casa Martín. A una calle, está El Huerto Los Cantones (Cantón Pequeño, 22) donde, si todavía te queda hambre, o bien acabas de comenzar la ruta, quedarás satisfecho con la miniburguer de pez espada, tomate semiseco, espinaca fresca y salsa de almejas en pan de cereales. ¿Quién da más?
No dejes escapar la oportunidad de hincarle el diente a las mejores tapas de corte tradicional y creativas que puedes encontrar actualmente en A Coruña. Consulta nuestros vuelos aquí.
Texto de ISABELYLUIS Comunicación
Imágenes de Turismo A Coruña, Concurso de Tapas Picadillo
+ infoDescubre el lado modernista de A Coruña
El Modernismo apareció entre finales del siglo XIX y principios del s. XX como un estilo rupturista con todo lo anterior, acorde con la mentalidad cosmopolita y emprendedora del momento.
En 1883 la ciudad necesitó de una ampliación y fue cuando se construyó su famoso Ensanche, que ocupa las actuales calles de Juana de Vega, Picavia, Feijoo, plaza de Lugo y plaza de Pontevedra.
La burguesía local, enriquecida con el comercio ultramarino, construyó en este espacio lujosas residencias que imitaban las de Viena, París, Praga, Budapest y Berlín, y que mostraban al exterior su prosperidad económica y sus inquietudes culturales. De esta manera consiguieron diferenciarse de la vieja aristocracia herculina, que seguía habitando la Ciudad Alta o Ciudad Vieja en vetustos caserones sin galerías y con habitaciones oscuras y mal aireadas, de espaldas al mar y a la modernidad.
El Modernismo, propiamente dicho, llega a la ciudad en 1906, gracias al arquitecto cubano Ricardo Boán y Callejas y al arquitecto coruñés Antonio López Hernández, los cuales importan las nuevas ideas constructivas de Austria, Suiza y Alemania. De allí traen revistas, catálogos y fotografías con diseños del austríaco Otto Wagner y del belga Víctor Horta.
Una de las características que más nos llama la atención son los rostros femeninos que adornan algunas de las casas que todavía hoy se mantienen en pie. Éstos se inspiran en su mayoría, en una dama inglesa. Eilizabeth Siddal, esposa del pintor prerrafaelita Dante Gabriel Rossetti. Su belleza lánguida, enigmática y sus largos cabellos la hicieron famosa al morir intoxicada por sobredosis de láudano, una mezcla de opio y alcohol.
El estilo ornamental del inglés Owen Jones (1808-1874) influye en el Modernismo coruñés. Los artistas locales decoran las fachadas y los portales con lirios, hojas de castaños de indias, plantas acuáticas, rosas y camelias en guirnaldas multicolores que salen al encuentro del paseante para dar placer a los sentidos.
La rosa de Glasgow del arquitecto Charles Rennie Mackintosh y plantas de tallos ondulantes que transportan savia se apoderan de las galerías. Entre ellas se extienden las superficies transparentes del cristal como alas de libélulas. Pero también la influencia japonesa se hace patente en forma de lirios repujados, cañaverales y mariposas sobre nenúfares, hojas de acebo estrelladas y flores de loto que enmarcan ventanas y ascensores dando lugar a una arquitectura ecológica. Disfruta de una ruta modernista por la ciudad. Descárgate la guía aquí.
Top-5 del modernismo en A Coruña
1. Casa Rey (1911)
Obra de Julio Galán, condensa en su arquitectura la esencia de la ciudad de cristal. La cornisa rizada, la cerámica vidriada de inspiración mudéjar y los balcones de la fundición Wonenburger la convierten en una auténtica casa de muñecas para las damas de la época adornadas en sus balcones con tocados de gardenias y palmas. El chocolate era otro de los productos exóticos que los barcos traían de las Indias y de otras colonias al puerto de A Coruña. Chocolaterías de aquella época continúan abiertas al público en las calles Riego de Agua, plaza de Lugo y estrecha de San Andrés. De ahí el gentilicio popular que llama a los coruñeses "cascarilleiros" aludiendo a la cáscara del cacao, cuyo olor aromatizaba las calles. Plaza de María Pita, 12.
2. Casa Molina (1915)
Edificio de Rafael González Villar. En este edificio vivió Don Raimundo Molina, representante del Lloyd Real Holandés y cónsul de los Países Bajos. Él fue el padre del conocido alcalde Don Alfonso Molina. Influida por el modernismo italiano de Turín, cierra escenográficamente, con sus guirnaldas y cintas colgantes, la vista de la ciudad antigua. Santiago, 2.
3. Kiosko Alfonso (1912)
Construido también por Rafael González Villar, representa un magnífico ejemplo de la arquitectura de recreo de principios del siglo XX. De planta rectangular, fue café, sala de espectáculos y cine, cuya pantalla central distribuía el espacio en dos salas. Los espectadores veían, desde una de ellas, la película en positivo, y al "revés" o en negativo, desde la otra, con entrada más barata. Convertido en 1982 en palacio de exposiciones, conserva la decoración original modernista, con dragones que envuelven y sumergen al espectador en un mundo de enigmas y fantasías. Jardines de Méndez Núñez.
4. Compostela, 8 (1910)
Otro ejemplo de Julio Galán Carbajal. El vestíbulo de entrada en la calle Compostela, n° 8, es el más atractivo de la ciudad. Paredes, techos y arco de acceso al ascensor lo convierten en un original invernadero de estuco, repleto de plantas acuáticas, con lotos, nenúfares y lirios entrelazados. Los leones del portal, el águila y las cariátides de la cornisa defienden simbólicamente a los moradores de la casa, como en los antiguos palacios persas.
5. Plaza de Lugo, 13 (1912)
Por último, esta residencia burguesa ideada por Antonio López Hernández, vinculada a la familia del actor coruñés Fernando Casado D'Arambillet (conocido como Fernando Rey), expresa hacia el exterior, con su desbordante decoración, el poder económico de sus moradores. Una gran guirnalda de rosas la adorna teatralmente y conduce nuestra mirada hacia la gran cariátide femenina que domina el conjunto. Su gramática decorativa la convierte en la casa más hermosa de la ciudad.
¿A qué esperas para descubrir estas joyas arquitectónicas del modernismo en A Coruña? Consulta nuestros vuelos aquí.
+ info
Ferrol, una joya fortificada próxima a A Coruña
¿De dónde viene el nombre de Ferrol? Dice la leyenda que "Ferrol" proviene del santo bretón de nombre San Ferreol, el cual se cuenta que arribó a tierras gallegas en un barco entre un impresionante coro de siete sirenas. Pero estudios más terrenales dicen que lo más probable es que el origen de este término se encuentre en la toponimia medieval, relacionando dos palabras que pueden significar bien 'puerto – cercano' o 'embarcadero sobre pilastras'.
Historia
Los primeros pobladores de aquel enclave fueron los celtas. Poco después pasaron a incorporarse al Imperio romano en el siglo I a. C. A partir de ahí los habitantes de aquella villa próxima al mar empezaron a especializarse en la exportación pesquera y conservera. En 1087 fue la primera vez que se usó el topónimo de Ferrol en un documento eclesiástico que hace referencia a una donación realizada al monasterio próximo de San Martín de Jubia por parte de una pequeña población costera, que contaba con una pequeña iglesia dedicada a San Julián. El Ferrol de la Edad Media se situaba sobre lo que en la actualidad se conoce como barrio de Ferrol Vello.
Desde A Coruña
Ferrol es una ciudad que está bien comunicada con las principales poblaciones del norte de Galicia. Se encuentra a poco más de 42 minutos de A Coruña, en un trayecto en coche con impresionantes paisajes a través de la AP-9. Pero desde allí también es fácil llegar por carretera a otras poblaciones como Villalba, Naró y Ortigueira. En el camino que va de A Coruña a Ferrol se atraviesan numerosos ríos como el Eume. A lo largo del viaje se alternan las extensas praderas verdes plagadas de riachuelos de ensueño, con las panorámicas vistas al gran océano. También se pasa junto al Parque Natural Fragas do Eume, sin duda una parada obligada para el viajero. Se trata de uno de los bosques atlánticos de ribera mejor conservados de toda Europa. Se extiende a lo largo de 9.000 hectáreas que a día de hoy se mantienen prácticamente vírgenes. El parque es de forma triangular y se ubica entre As Pontes, Pontedeume y Monfero. Entrar en el bosque es como trasladarse a un cuento de hadas y duendes. Lo mejor es dejarse llevar y perderse a través de su frondosa vegetación, llegando a ser tan tupida por momentos que se hace imposible vislumbrar los rayos del sol. Aquí encontraremos fresnos, robles, chopos, alisos y un sinfín de especies de helechos y líquenes. Pero no todo acaba aquí, el agua es un componente muy importante y las fuentes y cascadas abundan por doquier. Si tienes paciencia y no te dejas embaucar por la flauta mágica de la naturaleza puedes conseguir una más que merecida recompensa: la visita del encantador monasterio de Caaveiro, un antiguo convento establecido aquí en el año 934 d. C. desde el cual se divisan unas majestuosas vistas de esta espesura de fantasía.
Paseo por el barrio de la Magdalena
Para entrar en ambiente, nada mejor que iniciar un paseo por el Barrio de la Magdalena, una de las zonas comerciales y de ocio más importantes. Trazado exactamente como una cuadrícula, a la manera racionalista de la Ilustración, y con excepcionales construcciones modernistas como el Teatro Jofre (1892), el Mercado de La Magdalena- “La Pescadería” (1923), el Casino Ferrolano (1923), el Hotel Suizo (1916), o el Banco Hispano-Antigua Fonda Suiza (1909-1910). El barrio se puede recorrer sin problemasa pie, en coche o autobús. Con una disposición urbana similar al Ensanche de Barcelona está parcelado en numerosas manzanas de idéntica forma y dimensiones. Destacan en los extremos dos amplias plazas cuadradas (Plaza de Amboage o del Marqués de Amboage, y Plaza de Armas). Conserva viviendas del s. XVIII, con balcones en hierro forjado sobre ménsulas de piedra y galerías de madera acristalada en blanco (la mayoría de ellas ya del s. XIX); además de edificios de estilo modernista, El Barrio de A Magdalena fue declarado Conjunto Histórico-artístico en 1983. Además, si lo que quieres es ir de compras, en el barrio hay cientos de establecimientos comerciales, sobretodo a lo largo de sus calles principales: Real, Magdalena, Igrexa, Dolores, Galiano y María. Hay un abundante número de negocios textiles, así como sector de la hostelería. La zona de tascas y bares donde poder disfrutar de tapas y copas se ubica a lo largo de la calle del Sol.
Ciudad Fortificada
Una auténtica joya dentro de la historia naval son el Castillo de San Felipe, las diferentes fortalezas de la población y en especial, el Arsenal. Construido en el siglo XVIII, también bajo el estilo de la Ilustración, es un complejo de obras hidráulicas y edificios únicos en todo el continente, entre los que se incluye el Museo Naval, también de visita ineludible. Incluye la Porta do Dique, puerta de estilo neoclásico que comunica el Ferrol Vello con el Arsenal, que fue realizada bajo el reinado de Isabel II. No hay que dejar escapar la ocasión de visitar el Castillo de San Felipe, que nos evocará épocas pasadas y la importancia que el elemento militar tuvo en la construcción y desarrollo de la ciudad. De estilo neoclásico, su construcción se inició en tiempos de Felipe II. Sin duda constituye uno de los mejores ejemplos de las denominadas "baterías-abaluartadas" del siglo XVIII. Desde esta fortificación se pueden admirar unas grandiosas vistas sobre toda la ría y el Castillo de A Palma.
La Armada
Ferrol es una población dedicada sobretodo a una actividad económica marítima. De ahí que cuente con un puerto pesquero y comercial, astilleros civiles y militares, y las magníficas instalaciones de La Armada Española. Ésta última es una de las fuerzas navales activas más antiguas del mundo. Funciona desde finales del siglo XV. La Armada Española ha tenido un papel protagonista en la Historia de España, particularmente en los ámbitos logístico y defensivo durante la época del Imperio Español. Entre los grandes hitos de la Armada están el descubrimiento de América y la primera vuelta al mundo hecha por el hombre, a cargo Juan Sebastián Elcano La Armada Española fue la más poderosa del mundo desde el siglo XVI hasta mediados o finales del XVII.
Ferrol es sin duda una oportunidad única de descubrir un pedazo de nuestra historia dentro de un exuberante marco paisajístico. ¿A que esperas para reservar tu Vueling? Consulta nuestros vuelos aquí.
Texto: Isabel y Luis Comunicación
Fotos: Juan Balsa, Diputación de A Coruña y Concello de Ferrol
+ info
Estas son las nuevas rutas de Vueling a Londres
Málaga, Menorca, Sevilla, Granada, A Coruña, Asturias (Oviedo), Almería y Cádiz (Jerez) cuentan con un vuelo directo a la capital de Reino Unido, al aeropuerto de Gatwick.
+ info