Somos muchos los que nos hemos enganchado a la serie Chernobyl. Si eres uno de ellos, seguro que no has podido evitar googlear “Prípiat hoy” o “Chernóbil hoy” para comprobar si lo que vemos en la serie es real o, sencillamente, para ver cómo es la zona del accidente nuclear más de 30 años después. Puede que incluso te hayas planteado coger un avión a Kiev para visitarla. ¿Y por qué no? Eso sí, hay unas cuantas cosas que debes saber antes.
AVISO: No te preocupes si aún no has visto la serie Chernobyl: en este caso no hay spoiler posible, solo hace falta conocer un poco la historia para saber cómo terminó, si es que de verdad ha terminado…
Daniel Talavera es uno de eso fans de la serie que decidió aprovechar su escapada a Kiev para visitar la zona del accidente. Quería ver cómo es un lugar que ha quedado congelado en el tiempo y descubrir hasta qué punto son capaces estos lugares de trasladarte a ese momento, al desastre que ocurrió el 26 de abril de 1986. Así que, ¿quién mejor que él para contarnos todo lo que necesitamos saber?
- Los expertos dicen que es seguro visitar la zona pero, ¿no tenías miedo?
Tras documentarse un poco, siguiendo las pautas del guía y usando el sentido común, visitar la zona de exclusión no tiene por qué implicar riesgo alguno, con lo cual no tuve ningún miedo. El remanente de radiación que queda en el aire, incluso a 50 metros del reactor nº 4 de la central, es muy muy poco.
- ¿Qué precauciones se aconseja tomar para visitarla?
Antes de entrar en la zona de exclusión recibes unas instrucciones muy elementales: no llevar ropa de verano, llevar manga larga y pantalón largo, no salir del camino marcado, no tocar nada, no entrar en edificios abandonados y evitar el contacto con los animales que allí habitan (principalmente perros salvajes).
Respecto a los trajes o mascarillas, la mayoría de visitantes no los llevaban, porque el efecto que tienen es prácticamente nulo: solo sirven para partículas suspendidas en el aire y no para la radiación en el aire. No obstante nosotros decidimos llevar traje y protección para el calzado, más por evitar tirar nuestra ropa después (no es necesario según el guía, pero por si acaso) que por el riesgo que implica.
- ¿Es posible ir por libre a Chernóbil?
Nos dijeron que es posible, aunque muy complicado. Hay que gestionar permisos para acceder, tanto para uno mismo como para el vehículo con el que se accede a la zona de exclusión, y parece que no les gusta dar estos permisos a visitantes sin un guía local o agencia. En cualquier caso, sería una locura ir por libre sobre todo por el riesgo de meterse donde no toca.
- ¿Es fácil encontrar tours organizados desde Kiev?
Hay muchas agencias que organizan este tipo de tours, tanto grupales como privados, con lo que es muy sencillo encontrar un tour organizado.
- ¿Con cuánto tiempo de antelación hace falta reservar un tour?
Conviene hacerlo con cierta antelación, alrededor de una semana, por la lista de espera que pudiera haber, y por la gestión de los permisos. Nosotros a base de insistencia tuvimos la suerte de encontrar una agencia que nos organizó el tour del sábado para el domingo, aunque fue un tour privado solo para nosotros.
- ¿Qué zonas visitaste?
Dentro de la zona de exclusión las zonas que merece la pena ver, y en las que tuve la suerte de estar, fueron el Rádar DUGA o Chernobyl-2, el “pueblo fantasma” de Prípiat, el famoso “Puente de la Muerte”, el bosque rojo, las torres de refrigeración sin terminar y la central nuclear, con el reactor nº 4 bajo el sarcófago que se construyó para sepultarlo.
- ¿Es posible quedarse más de un día en Chernóbil?
Dicen que ni en un mes podrías visitar todo lo que la zona de exclusión puede ofrecer. Existe la posibilidad de hacer tours de dos o tres días e incluso visitar la central por dentro, ver el reactor nº4 y la sala de control desde donde se operaba, con los controles tal cual quedaron el 26 de abril de 1986.
- ¿Qué es lo que más te impactó?
Es muy impactante ver la ciudad de Prípiat, ver los efectos que tuvo el desastre en la ciudad, cómo tuvo que ser todo abandonado de un día para otro y cómo la vegetación se ha abierto paso en una ciudad fantasma.
- ¿Alguna curiosidad que quieras compartir?
Como curiosidad simplemente apuntaría que últimamente se están haciendo virales supuestas imágenes de gente frivolizando con el lugar y con el accidente, sin tener en cuenta medidas de protección o metiéndose por sitios peligrosos, y los guías de allí nos aseguraron que esas fotografías no fueron tomadas en la zona de exclusión, sino que únicamente habían etiquetado el lugar.
- ¿Recomendarías la visita?
Desde luego, es una oportunidad única para verlo con tus propios ojos y trasladarte a un momento, aunque muy desafortunado, de nuestra historia.
Con todo lo que nos ha contado Daniel me entran unas ganas locas de coger un avión a Kiev y visitar el lugar, que además tiene mucho más que ofrecer a parte de su historia nuclear. Dicen de hecho en Ucrania que han notado un repunte del turismo en su país. Solo espero que la gente no olvide que Chernóbil es un lugar en el que ocurrió una gran desgracia. Es importante visitarlo para entender la historia, pero quizás no sea el lugar para ir de influencer, algo que lamentablemente está ocurriendo en otros lugares como Auschwitz.