Si viajas al centro de Europa en diciembre, ¡ya puedes ir con cuidado! Podrías encontrarte con Krampus, un ser terrorífico que no suele aparecer en los cuentos de Navidad y que, en vez de traer regalos a los niños, viene para asegurarse de que se portan bien.
- Se habla mucho de Santa Claus, que trae regalos de Navidad a los niños con su trineo volador, pero incluso el bueno de Santa Claus necesita a veces recurrir a estrategias más oscuras para persuadir a los niños de que se porten bien. Y es ahí donde entra el temible Krampus, el otro personaje de la leyenda del que no siempre se habla. ¿Lo conoces?
- ADVERTENCIA: Antes que nada, tenemos que avisarte de que esta es una historia no apta para temerosos, pero si lo tuyo no son los cuentos dulces de Navidad, este te encantará.
- Cuentan que Krampus es un gran ser peludo, mitad cabra y mitad demonio, que despierta de su letargo cada año en las fechas previas a la Navidad. Se le ha visto vagar por el centro de Europa, y más concretamente por Múnich (imposible no cruzarse con él en la Krampus Run), Salzburgo e Innsbruck. Concretamente en la noche del 5 de diciembre, coincidiendo con la llegada de Santa Claus (o San Nicolás, o Papá Noel, como prefieras llamarlo), es cuando se lanza a las calles al acecho de los niños “malos”. En estas oscuras y frías noches algunos aseguran haberle visto colarse en las casas para coger con sus garras a los niños de su particular lista negra. A estos los tira en el cubo de madera que cuelga de su hombro para llevárselos a su guarida —o al infierno, nadie lo sabe bien— pero el mensaje está claro: pórtate bien si no quieres recibir su visita.
Recuerda que, si durante estas fechas tienes previsto visitar el centro de Europa, deberás ir con con mucho cuidado y apretar a correr si escuchas el sonido de unas pezuñas. Desde luego, una bestia así de temible hace que otras costumbres, como la de regalar carbón a los niños gamberros, parezcan una tontería, ¿a que sí?