Para muchas personas verano es sinónimo de calor y playa, pero en tu mente tienes planes bien diferentes para estas vacaciones. Si te apetece cambiar el bañador por el anorak, te proponemos tres destinos fríos para este verano que te pueden interesar. Próxima parada: Reikiavik, Oslo o Helsinki.
- Reikiavik
Considerado uno de los países más verdes del mundo, Islandia ofrece espectaculares paisajes que tienes que contemplar con tus propios ojos. En verano es un buen momento para descubrir el país: goza de suaves temperaturas y se produce el fenómeno del sol de medianoche cuando el sol nunca llega a irse. Para conocer toda la isla te recomendamos alquilar un coche y seguir la Ring Road o Ruta número 1, la carretera que rodea todo el país. La capital, Reikiavik, está repleta de vida: restaurantes, cafeterías, tiendas, museos, galerías de arte… Visita la catedral Hallgrímskirkja, una imponente iglesia luterana con apariencia de nave espacial desde donde disfrutarás de unas preciosas vistas de toda la ciudad. Otro must islandés son las piscinas termales al aire libre, la de Laugardalslaug es la más grande del país. Haz un paseo por el lago Tjörn y visita la pequeña isla Videy, donde se encuentra Imagine Peace Tower, monumento que Yoko Ono dedicó a John Lennon.
- Oslo
En verano Oslo goza de suaves temperaturas. Esta ciudad tiene una amplia agenda cultural: conciertos, festivales, teatro, museos... En tu ruta por la capital incluye la visita a la Galería Nacional, donde se encuentra "El Grito", la popular obra de Edvard Munch y al Museo de los Barcos Vikingos, donde podrás ver los tres barcos vikingos mejor conservados del mundo. Otro reclamo que tiene la ciudad es el parque de las esculturas de Vigeland, donde se encuentran más de 200 esculturas entre las que destaca el Monolito, columna de 14 metros de altura compuesta por 121 figuras humanas. En la zona portuaria de Aker Brygge encontrarás una amplia oferta de ocio con restaurantes, terrazas y tiendas. Finalmente, no te vayas de Noruega sin recorrer el fiordo de Oslo a bordo de un crucero y visitar algunas de sus islas como Hovedøya, Lindøya o Gressholmen.
- Helsinki
Durante los meses de verano, en Finlandia, el sol no se oculta. Este fenómeno se conoce como el sol de medianoche y es probablemente la época más espectacular del año para viajar al país escandinavo. Por la noche, el sol nunca llega a irse, su luz es cálida y adopta un tono entre amarillo y rojizo. La capital, Helsinki, está rodeada por el mar Báltico y por más de 300 islas. Te recomendamos que cojas el ferry y te acerques a la isla de Suomenlinna, una impresionante fortaleza compuesta por cuatro islas unidas por puentes, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. En tu ruta por la ciudad visita la catedral, pasea por el puerto, recorre el mercado Venha Kauppahalli (Old Market Hall) y déjate impresionar por la iglesia de Temppeliaukio (Rock Church), una iglesia luterana hecha de piedra con una gran cúpula de cristal. También recomendamos la visita a la ciudad costera de Porvoo, a una hora en coche desde Helsinki. Esta es la segunda ciudad más antigua de Finlandia y sus casitas de color rojo le dan un encanto especial.