A poco más de una hora de Barcelona encontramos PortAventura World, un resort con dos parques temáticos que dispararán nuestra adrenalina y nuestras emociones a partes iguales.

Hay miles de motivos para visitar Barcelona que van mucho más allá de playas, arquitectura, buen clima y una gastronomía de gran nivel. Uno de ellos es conocer sus alrededores: las calles blancas de Sitges, un hermoso pueblecito costero; las particulares formas onduladas de la montaña de Montserrat; las calas de la Costa Brava (sí, también en invierno son bonitas), y así un montón de cosas más.

Entre ellas se encuentra PortAventura World, un resort donde encontraremos, por un lado, PortAventura Park, un parque temático inspirado en los diferentes rincones del mundo y, por el otro, Ferrari Land, dedicado al universo Ferrari. La oferta es tan amplia y variada que merece la pena dedicarle al menos un par de días si no queremos perdernos nada. Hay packs que incluyen la entrada combinada a PortAventura Park y Ferrari Land, que también puede incluir alojamiento en alguno de los hoteles temáticos del resort si nos apetece vivir la experiencia completa. Si no, siempre se puede escoger algún hotel cercano en Salou.

Si vamos en verano, es imprescindible bajar revoluciones en el parque acuático Caribe Aquatic Park, cuyo Ciclón Tropical es solo un ejemplo de esos toboganes que crean adicción y que permanecen en nuestro recuerdo durante todo el verano.

¿Cómo llegar a PortAventura World?

Los 2 aeropuertos más cercanos a PortAventura World son el Aeropuerto de Reus (9,7 km) y el Aeropuerto de Barcelona (96,4 km).

Desde Reus, el aeropuerto está a tan solo 15 minutos de PortAventura World y hay un servicio de bus que te llevará hasta el parque.

Desde Barcelona, PortAventura está a 1h 15m en coche (si necesitas alquilarlo, puedes aprovechar las ofertas que te ofrece Vueling Cars). Otra opción es ir en bus o en tren, que tarda 1h 30m aproximadamente y te deja en la estación Salou – PortAventura, a 750 m del parque. Si lo prefieres, puedes comprar un pack que te incluye entrada y traslado desde Barcelona.

Atracciones para los amantes de las emociones fuertes

Llegamos a PortAventura Park y en seguida nos sentimos atrapados por ese ambiente emocionante y repleto de retos, trepidante y al mismo tiempo emotivo, que nos da la bienvenida nada más atravesar la puerta. Si buscamos emociones fuertes, nada mejor que empezar por una de las atracciones estrella, Furious Baco, capaz de ponerse a 135 km/h en solo tres segundos para realizar un vertiginoso recorrido que nos lleva incluso a rozar el agua. 

¿Ganas de más? Shambala, una montaña rusa solo apta para espíritus aventureros, nos espera para acelerar las pulsaciones, mientra que el popular Dragon Khan es un auténtico loop de subidas y bajadas que helará la sangre incluso a quienes lo miran desde el suelo. Por último, los que sufran de vértigo mejor que no se suban al Huracán Cóndor, con una caída libre de 100 metros, que encontramos en la zona de México.

Y también atracciones para todos los públicos

Pero no todo son descargas salvajes de adrenalina en PortAventura World, donde encontramos otras atracciones más amables, pensadas para todas las edades. Hay canoas, los autos de choque Wild Buffalos, una pequeña montaña rusa llamada Tami Tami, Mariposas Saltarinas, la Cobra Imperial y una larga retahíla de propuestas que nos harán repetir una y otra vez. El Laberinto Blacksmith es una sucesión de misterios inspirados en el lejano oeste, mientras que Stampida nos hará recorrer el parque a la manera de los primeros colonizadores europeos que llegaron al continente americano.

Espectáculos para disfrutar en familia

No todo son atracciones trepidantes y viajes frenéticos a la velocidad de la luz. En PortAventura World podremos disfrutar de un sinfín de espectáculos para todas las edades en sus diferentes rincones: Mediterrània, Polinesia, China, México, Far West y SésamoAventura. También podremos conocer a Shrek, a Tadeo Jones, a Elmo y a sus secuaces, entre otros personajes ilustres con los que nos cruzaremos a lo largo del parque.

Si visitamos el parque en Halloween o en Navidad nos encontraremos propuestas especiales: animación en las calles, decoración, espectáculos inspirados en estas fechas y más.

Ferrari Land: el otro parque temático

Junto a PortAventura Park encontramos también Ferrari Land, un parque inspirado en exclusiva en el universo Ferrari que merece una visita tanto si somos amantes de la velocidad como si no. Con atracciones como Crazy Pistons, Flying Dreams, la espectacular Torre Caída Libre y otras que nos permitirán ponernos al volante de algunos cochazos de la carrocería, este parque temático merece también al menos una jornada entera para disfrutar de sus numerosas atracciones.

Aprovecha y visita Barcelona

Aunque el plan sea quemar todas las naves en PortAventura World, no podemos pasar por la Ciudad Condal sin detenernos a pasear por las callecitas de su casco antiguo, que siguen conservando ese magnetismo atemporal, hacer una ruta de shopping por tiendas de diseñadores locales en barrios como Gràcia o el Born o disfrutar de un buen tapeo frente al mar en alguno de los restaurantes de la Barceloneta. Si nos apetece contemplar la ciudad desde las alturas nada mejor que subir a Montjuïc o el Tibidabo y disfrutar de un oasis de naturaleza sin salir de la ciudad.

Otro de los puntos fuertes de Barcelona es una agenda cultural frenética en la que siempre encontraremos aquella actividad que nos apetece hacer. Tanto si somos visitantes asiduos como si acabamos de aterrizar, seguro que acabamos yendo a conciertos, teatro, festivales, mercados, exposiciones y multitud de propuestas al aire libre durante todo el año.

Si nos queda tiempo: Salou y alrededores

Suele ocurrir que cuando se viaja en familia es difícil que llueva a gusto de todos, de modo que seguramente habrá en el grupo quien quiera quedarse para siempre en PortAventura World y otros que se mueran por exporar los rincones de la Costa Daurada, empezando por Salou. Las temperaturas templadas durante todo el año hacen que sea siempre una gran idea disfrutar de un paseo por sus playas, y si nos gusta el senderismo es imprescindible recorrer los 9 km que separan Pilons y el Faro de Salou. A apenas media hora de Salou encontramos L’Ametlla de Mar, un pintoresco pueblecito de pescadores de casitas blancas con hermosas playas cristalinas.

Si disponemos de tiempo siempre es recomendable visitar el Delta de l’Ebre, al sur de la provincia de Tarragona, para disfrutar de unos arroces de lujo rodeados de arrozales, de grandes pescados y mariscos y de agradables paseos en bici en cualquier época del año por sus senderos sencillos y accesibles. Por supuesto, la ciudad de Tarragona, con su muralla romana y numerosos puntos de interés turístico, es también un buen lugar para pasar un día junto al mar. La ciudad cuenta, además, con una oferta gastronómica basada en la tradición marinera más que interesante, que nos ayudará a reponer fuerzas tras haberlo dado todo el PortAventura World.