A 30.000 pies por viajeros para viajeros

Resultados

La bella y mágica Lisboa

Por Tensi Sánchez de Actitudes Magazine

Sin lugar a duda, Lisboa es una de las ciudades más bellas y mágicas de Europa. Desde el minuto cero, atrapa al viajero para sumergirle en un mundo de sensaciones que sólo en Lisboa podrán sentirse. No te dejes engañar por su afamada decadencia, dentro se esconde una Lisboa muy vanguardista, su manera de sentir el ocio y la cultura la está convirtiendo en el destino de moda, sin que sus “inquilinos” apenas se den cuenta. Los planes en la ciudad son infinitos ya que nos ofrece diversas alternativas bien diferenciadas por zonas y, además, siempre encontrarás ambiente en sus calles a cualquier hora del día y de la noche.

Moverse dentro de Lisboa no es fácil, la estructura de sus calles entramadas y sus cuestas interminables no ayudan, pero el transporte e incluso el servicio de taxi no es caro.
 Aquí van algunos tips de viaje que difícilmente encontrarás en las guías turísticas.


Zona del Puerto – Santa Apolonia

En esta zona relativamente nueva se han abierto muchos restaurantes y tiendas situados dentro de antiguas naves del puerto, esto hace que los espacios sean espectaculares. Apetecible al 100% son las delicatessen y los desayunos de Gourmet Deli Deluxe, los platos internacionales del restaurante Bica do Sapato y la tienda de mobiliario vintage Loja da Talaia.
 Toma buena nota para el plan nocturno ya que es en esta zona donde está la famosa discoteca LUX, pero has de saber que si no estas en la “guest list” o te cuela algún buen amigo, la cola para entrar es mortal, aunque merece la pena.

Zona Barrio Alto -Príncipe Real

En el Barrio Alto cobra fuerza la zona Príncipe Real, antigua zona residencial junto al Jardín Botánico con muchos restaurantes y las tiendas más modernas de la urbe, destacamos algunas de las mas vanguardistas como las concept stores Espacio B,21 pr Concept StoreReal y Fabrico Infinito.
 Si eres fashionista, son parada obligada a las tiendas de Nuno Gama, Alexandra Mouray Kolovrat, junto Ricardo Preto, Nuno Baltazar son algunos de los diseñadores consagrados que están presentes en Moda Lisboa, el certamen bianual más importante para el sector portugués de la moda que cada vez toma más relevancia a nivel internacional.

Seguimos la ruta con parada en Poison d’amour, una pastelería que te dejará con la boca abierta, no dudes en salir a su maravillosa terraza, disfrutaras de un momento mágico.
 Desde la terraza del café-bar Lost In podrás disfrutar de unas espectaculares vistas de la ciudad con una decoración inspirada en la India. Si te apetece degustar una auténtica comida a la portuguesa como si estuvieras en casa de la abuela, Tasca Do Urso en Rua Do Monte Olivete 32. Y por último, un guiño a la peluquería Facto Royale, decorada con muy buen gusto y dicen que es de las mejores de la ciudad.

Zona Baixa y Chiado

Un buen plan de tarde es perderse por las calles de Baixa y Chiado y saborear una Lisboa en su esencia más genuina, sus casas, sus cafés y sus tiendas. Aquí está situada la tienda de Pelcor, famosa marca portuguesa por sus accesorios de moda realizados con corcho, los bolsos de mano son una locura.
 En la calle Rua Nova do Carvalho está el bar Sol y Pesca, donde podrás elegir entre cientos de conservas con un buen vino, rematamos con un buen cóctel en el pub Pensao Amor que fue un antiguo burdel y mantiene tal cual las estancias, el techo es una replica de los frescos de la bóveda de la Capilla Sixtina. ¡No pierdas ojo a ningún detalle!
 En la misma acera esta el restaurante La Velha Senhora que ofrece una comida local deliciosa y a buen precio.

Zona Alcántara

. Es otra de las zonas de Lisboa que poca gente conoce y en ella se han asentado las tiendas, cafés y restaurantes más cool de la ciudad, mezcladas con las agencias de publicidad y estudios de fotografía más vanguardistas del momento.
 Es como entrar en una pequeña ciudad, una fábrica de experiencias donde todo esta ad hoc creado para LX Factory.

El domingo es un buen día para visitar esta zona, ya que te encontrarás con el LX Market donde se puede encontrar maravillas como porcelanas, libros, ropa, música en directo, etc. 
La decoración de todos los locales es impactante debido a que conservan el estilo del los espacios industriales que en su día fueron. Te encontrarás ante más de cien locales únicos como la espectacular la librería Achimpa, el restaurante La Cantina o incluso un kiosco de revistas dentro de un container llamado Mag, todo esto y mucho más sucede en LX Factory.

Zona Olivais

Otra de las zonas interesantes para visitar es la nueva Lisboa que nació a partir de la Expo de 1998. Si te gusta la arquitectura disfrutarás de grandes obras como el pabellón de Portugal obra Álvaro Siza ganador de un Pritzker, entre otras muchas. La zona está totalmente habitada y todos los pabellones han sido recuperados, se puede decir que ha sido un gran logro de renovación urbana a tomar buena nota por otras ciudades europeas.
 La zona de la Expo conforma el nuevo distrito de Olivais, que se conecta a la ciudad mediante metro, el puente Vasco da Gama (el más largo de Europa) y la estación inter-modal diseñada por Santiago Calatrava.

Imprescindibles

*Probar el mejor dulce de la ciudad (y no es el pastel de Belén) en la Pastelería do restelo “Careca” en la calle Rua Duarte Pacheco Pereira. ¡Exquisitas Palmees do Careca!

*Admirar la obra de un posible futuro Pritzer, Charles Correa el edificio de la Fundación Champalimaud y comer dentro en el impresionante restaurante Darwin, situado en la avenida de Brasilia.

*Escoger un buen hotel como Eurostars Das Letras con unos servicios impecables que harán tu estancia más agradable.

*Entrar en el museo de la moda y diseño MUDE, un edificio de los años 50 que fue la sede central del Banco Nacional Ultramarino y del que han conservado parte de él en su interior, dándole a las exposiciones un aire industrial y decadente que aún las hace más interesantes.

Por Tensi Sánchez de Actitudes Magazine

Fotografía de Rubén Seco

Si te han entrado ganas de descubrir esta Lisboa poco conocida, ¿a qué esperas para reservar tu Vueling

+ info

Tánger en 7 terrazas

De Tánger, Truman Capote escribió: "Casi todo en Tánger es inusual y antes de venir aquí uno debe hacer tres cosas: vacunarse contra el tifus, retirar sus ahorros del banco y decir adiós a sus amigos". Muchas cosas han cambiado desde aquel entonces –Capote estuvo aquí en el verano de 1949–, pero Tánger conserva ese anzuelo invisible pero real que advirtió el autor de Desayuno en Tiffany's (1958)y A sangre fría (1965). "Es un puerto que te atrapa, un lugar intemporal; los días se deslizan con tanto disimulo como la espuma en una catarata". Así justificabael célebre escritor norteamericano que tantos viajeros –artistas, escritores, bohemios– que habían aterrizado en Tánger para una breve vacación, decidieran asentarse de forma indefinida para, sencillamente, ver los años pasar. Precisamente de esto trata la ruta de hoy, de sentarse en las mejores terrazas a tomarse un té y observar la bulliciosa vida tangerina pasar.

En lo más alto de la Kasbah

1. Desayuno con diamantes… en el Riad-Hotel La Maison Blanche

No se nos ocurre mejor manera de empezar el día en Tánger que desayunando en la panorámica terraza del  Riad-Hotel La Maison Blanche, situado en la parte más alta de la Kasbah, junto a la puerta principal de la antigua fortaleza. Tras pasar una plácida noche en cualquiera de sus nueve habitaciones –todas ellas decoradas de forma única y dedicadas a artistas que convirtieron Tánger en un lugar cosmopolita y fascinante (Paul Bowles, Juan Goytisolo, etc.)–, seremos testigos del despertar paulatino de la ciudad, disfrutando de la luz que tanto impresionó a Matisse, del mar, y de los tejados multicolores. Precio por habitación: de 100 a 150 euros (desayuno incluido).

El corazón de la Medina

Con el cuerpo descansado y bien alimentado, es hora de perderse por el laberinto de la Medina. Da igual por donde entres, a los dos minutos te desorientas por sus caóticas callejuelas, túneles de paredes de colores en los que jamás incide el sol, pero donde siempre llega su luz. A ambos lados de la refrescante gruta se solapan toda clase de pequeños talleres y negocios. Zapateros, cesteros, joyeros, lecherías, barberías, puestos de especias… El trajín de gente y mercancías es constante. Absolutamente todo se trae en carromatos, pues los coches no caben por estas callejas. Al agradable caos se suman vendedores ambulantes de fruta, pescado, menta, patatas, habas, baratijas, turrón, etc. Pero en la Medina también hay tangerinos ociosos que practican el sano vicio de sentarse en una terraza, o en el diáfano salón de un café, y dejan que el tiempo fluya.

2, 3 y 4. Tingis, Central y Fuentes… al calor del Zoco Chico

La pequeña pero concurrida plaza del Zoco Chico es perfecta para observar uno de los puntos neurálgicos de la medina tangerina. Hay diversas opciones, pero las más históricas y recomendables son el ventilado salón y la terraza del Café Tingis, donde el añado cartel reza que se sirve "todo siempre rápido y fresco", la del Café Central, situada justo enfrente, o los balcones del Café Fuentes, en la planta superior. Para llegar, lo mejor es tomar como referencia la plaza del Gran Zoco –oficialmente llamada 9 de abril de 1947–, que está a 2 minutos andando por la Rue Siaghine. De camino veremos la fachada de la iglesia de la Misión Católica Española, junto a los antiguos Almacenes Alcalá –"tejidos, novedades"–, y nos cruzaremos con numerosos despachos de cambio de divisas, escaparates llenos de cámaras fotográficas antiguas y muchas, muchísimas joyerías.

5. Café Ibn Batouta, en el corazón de la Medina

Más difícil de encontrar pero aún más auténtico es el Café Ibn Batouta, situado en el corazón de la Medina. De varias plantas –los clientes habituales se quedan en el primer piso, a menudo viendo partidos de fútbol en la televisión–, al final de la estrecha escalera aparece una terraza a dos alturas en la que se dan cita los jóvenes de Tánger para beber té, charlar y fumar con el cielo por testigo. Desde aquí no se ve el mar, sino una colmena de tejados y terrados adornados con antenas parabólicas y ropa tendida. Tampoco es el lugar más cómodo de la ciudad, pero sí uno de los más genuinos. Los precios populares –un vaso grande de té a la menta cuesta 6 DH– hacen que acudan muchos estudiantes de la ciudad. Junto a la pequeña barra donde preparan el té, cuelga una foto del actor Matt Damon, hecha durante el rodaje de la película El ultimátum de Bourne. A los clientes asiduos del local le gusta explicar que aquí se rodaron las escenas en las que el protagonista salta entre balcones, volando de un edificio a otro.

Vistas atlánticas

6. Café Hafa, el favorito de Paul Bowles

La escalonada terraza del Hafa es única. Situada sobre el océano, en pleno acantilado, está siempre, siempre, siempre llena de jóvenes que toman té con menta mientras hablan, fuman o se entretienen con juegos de mesa. Este café, fundado en 1921, era el preferido de Paul Bowles, y aquí estuvieron también los Rolling Stones, entre otros. El té es rico y barato –menos de 1 euro– y aunque el mobiliario de plástico actual le resta encanto, es ideal para pasar un rato relajante, leyendo, charlando, meditando con la mirada perdida en el horizonte azul marino. Llegar es facilísimo: saliendo por la puerta principal de la Kasbah –junto a la Maison Blanche–, se toma la calle que sube en dirección a la necrópolis fenicia, que dista apenas 5 minutos a pie y que también es muy popular entre los tangerinos, que acuden aquí a pasar la tarde. Un poco más allá, un callejón luminoso en el que los jóvenes compran y venden cigarrillos sueltos, nos conduce hasta el Café Hafa, donde también se puede comer cualquiera de los snacks típicos locales.

El frescor de la Kasbah

7. Morocco Café, paz a la sombra de un ficus centenario

A 20 metros de la entrada principal de la Kasbah, la tranquila terraza del Morocco Café es ideal para tomar un refrigerio, un té o incluso comer el plato del día, una ensalada, una quiche, etc. Toda la comida es casera. El lugar es algo más elitista que la media, y los precios se parecen a los del otro lado del Estrecho: un té –aquí lo sirven con su teterita– son 18 DH. Abierto a partir de las 9 de la mañana, excepto los lunes, que es el día de descanso. En el mismo edificio se encuentra el Morocco Club, un piano-bar en el que por la noche se puede disfrutar de buen ambiente, música y excelentes cocktails.

 

Texto e imágenes de Sergio Fernández Tolosa (Con un par de ruedas) para Los Viajes de ISABELYLUIS

 

+ info

Top 10 pabellones de la Expo Milán 2015

La Expo 2015 en Milán abrió sus puertas el pasado mes de mayo a los visitantes tras más de siete años de preparativos. Se trata de uno de los eventos internacionales más antiguos, con una tradición de más de 160 años. El lema de la Expo para esta edición es “Alimentar el Planeta, energía para la vida", abarcando ámbitos como la tecnología, la innovación, la cultura, las tradiciones y la creatividad, relacionándolos con la alimentación y la dieta. Tras unos días de visita por el inmenso recinto expositivo os hemos preparado una selección con los 10 mejores pabellones. No ha sido tarea fácil, ya que este año participan más de 145 países. 

10. Pabellón de México

El pabellón mexicano, diseñado por la oficina Loguer Design cuenta conuna estructura exterior que usa la hoja de maíz como inspiración principal, mientras que el diseño interior hace referencia al sistema de manejo integral de la Cuenca de México durante el imperio hidráulico-agrícola del rey Nezahualcóyotl, un verdadero logro en sostenibilidad al aprovechar óptimamente el entorno natural sin degradarlo.

9. Pabellón de España

Fue diseñado por el estudio b720 Fermín Vázquez Arquitectos. En un evento como este, que promueve una alimentación saludable, la dieta mediterránea ocupa un lugar central. El pabellón español fusiona la estructura de un invernadero con la de un granero tradicional. En éste se mostrarán diversos productos de la gastronomía regional, así como sus procesos de producción y cultivo de alimentos.

8. Pabellón de Italia

El Pabellón de Italia, diseñado por el estudio Nemesi & Partners Srl, Proger SpA y BMS Progetti Srl, está conectado con los espacios de exhibición, el auditorio y los salones de conferencias. Vale mucho la pena dejarse caer por esta construcción cuyos ejes se fusionan con la propia estructura. También se trata de una arquitectura sostenible, que apuesta por los paseos evocadores y el uso de nuevas tecnologías.

7. Pabellón de China

El Pabellón ondulante de China fue creado en colaboración con la Academia de la Universidad Tsinghua de Arte y Diseño y el estudio de arquitectos de Nueva York StudioLink-Arc. Se titula "La Tierra de la Esperanza. Comida para la Vida" y muestra el progreso de esa inmensa nación en la agricultura y el suministro de comida. Nos encantó el campo interior a base de lámparas LED. Éste simula un cultivo de acuerdo con el calendario lunisolar chino.

6. Pabellón de Austria

Es en realidad un bosque exuberante, al aire libre, dando a los visitantes la oportunidad de deambular por él y poder respirar aire fresco. Su generosa vegetación crea su propio microclima y aunque no está cubierto, la sombra de la arboleda proporciona a la construcción una temperatura que es siempre cinco grados menor que la temperatura del exterior. Cada hora el bosque produce suficiente oxígeno para 1.800 visitantes.

5. Pabellón de Ecuador

Se trata de uno de los proyectos de mayor aceptación por parte de crítica y público. Es obra del estudio español Zorrozúa y Asociados.En la fachada del pabellón de Ecuador queda plasmado su ideario “Viaje al centro de la vida", a la perfección, pero también otros como el de las oportunidades que se abren para el sector de la agricultura en los ámbitos del desarrollo sostenible, el bienestar común y la lucha contra el hambre, así como el de la alimentación de las culturas del mundo y los grupos étnicos. Destacan las cortinas que cubren todo el edificio a cargo de KriskaDECOR. Se trata de una innovación, puesto que es la primera vez que se recubre completamente toda la superficie de un pabellón con cortinas.

4. Pabellón de Alemania

A este pabellón se le conoce como "El Campo de Ideas" –más alemán imposible, ¿verdad?-.El uso de la arquitectura aquí, sirve para reflejar los paisajes naturales y ricos de Alemania, y para ello se sirven de curvas ondulantes, un gran toldo verde y enormes árboles solares, que producen energía a través de tecnología fotovoltaica orgánica. Seguimos una ruta a través de las "raíces de la nutrición" - agua, suelo, clima y biodiversidad - antes de llegar al "Jardín de las Ideas". El pabellón está lleno de lugares privados para relajarse y disfrutar de los paisajes y de música en vivo, sesiones de DJ y otros espectáculos.

3. Pabellón de Brasil

Aquí se combina la arquitectura y la escenografía con el fin de proporcionar a los visitantes una experiencia que transmita valores brasileños. Fue genial la idea de la red flexible, suave y descentralizada, la cual está presente en toda la construcción y que, según sus autores, representa el pluralismo del país. En medio de más de 130 construcciones, el Pabellón de Brasil es una buena excusa para hacer una pausa, -nosotros la hicimos – con la intención de crear una plaza pública que atraiga a las personas.

2. Pabellón de Emiratos Árabes Unidos

Diseñado por el estudio de arquitectura icónica Foster + Partners, cuenta también con paredes onduladas de gran altura, que reflejan los paisajes del desierto de los EAU. Esta estructura logra que la temperatura sea fría, ya que con, ni más ni menos, que 12 metros de altura se consigue una gran protección contra el sol, creando además caminos sombreados para los visitantes. El recorrido a través de estas vías nos condujo a los espacios de exposición al aire libre, y finalizó en un impresionante auditorio de oro

1. Pabellón de Reino Unido

El destacado Pabellón del Reino Unido para nosotros es el más espectacular de todo el recinto, por su originalidad y por su plasmación en el plano real. Ha sido diseñado por el artista británico Wolfgang Buttress, llama la atención por su parecido con un panal de abejas. Los visitantes del pabellón del Reino Unido siguen el camino de una abeja, girando a través de un campo de flores y hasta el corazón de la estructura de la colmena. Cuenta con sonidos de audio y señales visuales que están vinculados en tiempo real a una colmena real que se encuentra en el Reino Unido. Sonidos de audio de la llamada la reina de las abejas pueden ser escuchados en toda la exposición y las luces LED iluminan cuando aumenta la actividad de las abejas.

¿A qué esperas para venir a Milán? No hay nada mejor que una exposición universal para conocer el presente y futuro de buena parte de las naciones del mundo. ¡Vamos! Consulta nuestros vuelos aquí.

 

Texto de ISABELYLUIS Comunicación

Imágenes de Expo Milano 2015

+ info

El centro de Bruselas

Bruselas es el corazón de Europa, la cuna del Art Nouveau, la capital del cómic y la sede de las instituciones de la UE. Un paseo por Bruselas nos permitirá descubrir su maravillosa arquitectura, rincones encantadores y pequeñas delicias gastronómicas típicas de la ciudad como el chocolate, la cerveza o los mejillones.

En el centro de Bruselas puedes encontrar dos encantadoras tabernas en los callejones que emergen de la transitada Rue du Marché aux Herbes. Una de ellas es À l’image de Notre Dame, un local con decoración tradicional y un ambiente acogedor de cervecería popular que te transportará a un tiempo pasado.

Otra de las tabernas a las que se accede desde Marché aux Herbes es el Toone Marionette Theater, un lugar histórico de una popular dinastía de titiriteros. Alberga una típica taberna, un museo de la marioneta y un teatrillo con sus shows tan aclamado por los bruselenses como por los turistas.

Las Galerías Saint Hubert comunican la zona del Teatro de la Monnaie con la Gran Place, es un paso entre dos mundos, entre una Bruselas más moderna y la Bruselas más histórica. En ellas se concentran lujosas tiendas, bombonerías de tradición, librerías magníficas, galerías vanguardistas y cafés.

Justo a la salida de las Galeries Royales nos encontramos el restaurante À La Mort Subite, un lugar centenario en el que se puede degustar entre muchísimas otras, la cerveza con su nombre. Su nombre proviene de un juego de dados del siglo XIX al que jugaban los empleados locales durante su hora de descanso. Este es uno de los lugares más tradicionales de la ciudad con sus largos bancos de madera, techos altos y una colección de antiguos espejos y lo habitual es probara allí las cervezas Cherry o la Kirk junto a una tapa de queso o una de sus tostadas.

Esquivando los bares de los alrededores de la Grand Place, tan orientadas a la caza del turista en los que los maîtres intentan cazarte al vuelo para que te sientes a tomar sus típicos y caros mejillones con patatas, llegarás al Impasse de la Fidélité, el callejón donde se encuentra Delirium Tremens, uno de los lugares más conocidos de Bruselas, de peregrinaje para los amantes de la cerveza. Se trata de un enorme sótano al que se accede por unas escalas, decorado a la manera más rústica con barriles y forrado de bandejas en sus techos. Allí se sirven cientos y cientos de marcas y de todos los colores, olores y sabores, cada una con un vaso especialmente diseñado para disfrutarla en detalle.

A la salida del local no olvides pasar a visitar a Jeanneke Pis (niña que orina) al final del callejón. Constituye el contrapunto femenino del Manneken Pis, el símbolo más representativo de la ciudad.

Es el momento de visitar la Grand Place, la plaza central de Bruselas, considerada una de las más bonitas del mundo y desde 1998 patrimonio mundial de la UNESCO, que concentra gran cantidad de edificios históricos como el Ayuntamiento de estilo gótico en el centro, la Catedral de San Miguel y Santa Gúdula y el Castillo Real de Laeken, con sus grandes invernaderos. Entorno de la plaza se pueden observar las trazas de la antigua ciudad de un estilo arquitectónico que en el país se conoce como estilo español, dado que los principales edificios históricos de estilo flamenco datan de la época en que la actual Bélgica, entonces Flandes, era una de las provincias del imperio de Carlos V.

Continuando la ruta llegamos a Le Roi des Belges, un moderno café en 34 rue Jules Van Praet, en el que tomar un desayuno o una comida rápida se convierte en una delicia. Música agradable a un volumen moderado, un servicio atento y una selección de platos ricos y sanos como ensaladas, quiches o lasañas lo hacen ideal para hacer una parada.

Pero uno de los lugares más populares y céntricos de Bruselas para degustar pequeñas raciones elaboradas a base de pescado es el Mer du Nord. Unas cuantas mesas altas para comer de pie en la plaza, justo detrás de la iglesia de Sainte Catherinete permiten parar a degustar las típicas croquetas de camarones, la riquísima sopa de pescado o los mejillones. ¿Sabías que los mejores mejillones se comen durante los meses que contienen la letra r, como diciembre, enero, febrero o marzo?

Rodeada por las exclusivas marisquerías de la zona de Sainte Catherine, se encuentra una deliciosa hamburguesería gourmet Ellis Gourmet Burger.
 A la hora de cenar, estas marisquerías se llenan de gente, turistas y lugareños para una cena por todo lo alto. Pero si el bolsillo no te permite sentarse en sus terrazas, con una de estas enormes hamburguesas que cuestan entre los 8 € y los 10 € te quedarás lleno. Tienes también la opción de pedir el trío de minihamburguesa por 13 €, para probar las diferentes especialidades de un tirón.

Si continúas caminando por plaza de Sainte Chaterine te encontrarás con el centro cultural Micro Market Marché y un bar restaurante en su interior llamado Via Via Café en el que sirven comida internacional y bebidas orgánicas. En este centro se organizan fiestas, sesiones de DJs, conciertos, proyecciones y exposiciones temporales. Es un lugar para el encuentro entre los jóvenes creadores y los amantes del arte más alternativo.

Y si lo que gusta es un lugar con aire rockero y buenas carnes al estilo americano, Le Corbeau es tu lugar. Situado en la rue Saint-Michel está alojado en lo que era una de las fábricas de cerveza más antiguas de Bruselas.

Una de las atracciones de Bruselas son los recorridos por las callejuelas con los murales de cómic. Bruselas es la capital del cómic y ha visto nacer a personajes tan legendarios como Tintín, Lucky Luke, Spirou o los Pitufos. Una de las diversiones de la capital Belga es ir descubriendo durante el recorrido las recreaciones a gran tamaño de elementos y páginas de tebeos que puedes encontrar en cualquier esquina. La idea empezó en 1991 como una manera de rehabilitar viejos edificios que ahora se ha convertido en toda una seña de identidad de la ciudad.

Nosotros nos lo hemos tomado como una diversión y hemos ido fotografiando aquellas que hemos encontrado al paso, pero existe toda una ruta trazada que no deben perderse los amantes del noveno arte.

Por último os aconsejamos coger un día el tren y acercaros a Gantes. Tiene el privilegio de ser la ciudad flamenca con mayor número de edificios históricos, una intensa vida cultural y una situación privilegiada, entre Brujas y Bruselas, a 50 km de cada una de ellas. La ciudad cuenta con cinco abadías, tres beaterios y dieciocho museos entre otras numerosas atracciones, todas muy concentradas en el centro de la ciudad.

Te han entrado ganas de ir a Bruselas? Consulta aquí nuestros vuelos!

+ info