A 30.000 pies por viajeros para viajeros

Resultados

¿Por qué Roma es de otra pasta?

Este post es otro de esos caminos que llevan a Roma. ¡Esperemos que te convenza para querer ir (o volver de nuevo) a la capital italiana! En la ciudad eterna la pasta, la pizza y hasta los aperitivos saben diferente. Los romanos lo saben y el resto de italianos, también. Porque Italia, como ya sabéis, no hay sólo una.

Después de aterrizar, callejear y perdernos entre toda La Grande Bellezza, éstas son las direcciones clave para saborear Roma con gusto y esa actitud despreocupada pero controlada tan propia de la cultura italiana.

Dónde comer

Roma Sparita. Está en el Trastevere, en un rinconcito apartado del bullicio donde parece detenerse el tiempo. Imprescindible sucacio e peppe, el plato de spaghetti romano por excelencia, sus propuestas con setas en temporada y su tiramisú.

Romolo e Remo. Alejado del centro pero bien conectado por bus, este establecimiento tradicional suele estar siempre a reventar por lo que conviene reservar previamente. Cocina casera con generosas raciones,  apuesta por los platos de pasta, combinados con el mejor producto fresco, y por las pizzas si vas de noche. Servicio atento y cercano. Abre todos los días de la semana.

E-45 Piadineria Romagnola. Cerca de la Ciudad del Vaticano, resulta una opción más que plausible para comer algo rápido pero de calidad. Tú eliges el tipo de masa y su relleno. Te lo hacen al momento y es ideal para tomar con una birra artesana o incluso para llevártela a donde quieras. Prueba la clásica romana, la número 12 en la carta del establecimiento.

Taverna Trilussa. En esta taberna encontrarás exquisitosantipasti, embutidos autóctonos y destacables frituras en el Trastevere.

Assunta Madre. En una tranquila calle que discurre en paralelo al río Tevere se encuentra este templo del marisco. El vivero de la entrada es su mejor carta de presentación; como lo son también las fotografías expuestas en las paredes en las que aparecencelebrities que han pasado por la casa.

Da Felice. Imperdible trattoria en el Trastevere. Negocio familiar con recetas de toda la vida. Prueba el cordero al horno y los bucatini all’amatriciana, que son un tipo de espagueti algo más gruesos que los tradicionales, y abiertos (o perforados). Se consumen especialmente en el Lazio, y con esta salsa porque así ésta también entra en la propia pasta. No sólo por fuera. La salsa amatriciana, por su parte es una variante de las diferentes salsas con base de tomate, que en este caso incorpora panceta o tocino y queso. Las variables son muchas. All'amatriciana es cualquier pasta o plato con esa salsa. Para acompañarlo pide cualquiera de sus seleccionados vinos.

I Luzzi. Trattoria familiar con platillos romanos junto al Coliseo. Decántate por el menú o por alguna de sus pizzas. Es económica, en un enclave turístico.

Un buen helado tanto en Carapina –prueba su Nero assoluto- como en Vice café.

Dónde beber

Roscioli. Es la salumeria - charcutería o local para la degustación con predominio de productos en salmuera: embutidos y conservas sobretodo - de la ciudad, pero también una excelente enoteca. Si buscas un buen vino, aquí lo encontrarás seguro. Es un tiro a diana. Como lo son todas sus especialidades italianas.

Café Doney. Es uno de esos distinguidos cafés, también con terracita en plena Via Veneto, que hace las delicias de los romanos y de los turistas que quieren disfrutar de un buen aperitivo en una de las zonas más distinguidas y tranquilas de la capital italiana.

Porto Fluviale. Un antiguo almacén recuperado como enclave gastronómico de referencia en la zona Termini. Se puede comer y beber, sobre todo su café y el spritz de aperitivo.

To NY. El interiorismo y su larga barra con los cocteleros a tu alcance no pueden ser más llamativos. Pásate mejor por la noche, con el ambiente ya caldeado, y déjate en manos delbartender.

Dónde dormir

The Westin Excelsior Roma

Imponente hotel de porte clásico a dos pasos de la Piazza di Spagna y las calles más comerciales de la ciudad. Enclave único para entregarse a la dolce vita con sus completos desayunos con profusión de recetas caseras en tartas y pasteles; y platillos incluso de otros países del mundo. Amplias habitaciones con vistas, baños con todo lujo de amenities, salones de estilo imperial y unspa para reponerse y/o coger fuerzas antes de seguir devorando Roma. Bien comunicado por metro (parada Barberini) y bus.

Texto yf otografías de Belén Parra (Gastronomistas)

 

+ info

Escapada de tres días a Roma

En Roma es tal el volumen de cosas a ver y a hacer que lo mejor es tomárselo con calma y viajar pensado en que habrá una segunda vuelta. Ante todo, lleva un buen calzado en la maleta, pues lo mejor es recorrerla a pie y perderse por sus calles. En cada rincón hay una imagen capaz de transportarte a múltiples épocas o una iglesia esperándote para que te adentres en ella para ver qué tesoro esconde en su interior. A continuación te explicamos cómo afrontar una escapada de tres días a esta bella ciudad.

Primera jornada: un paseo por la antigua Roma

¡Qué mejor manera de realizar la primera toma de contacto con la ciudad que con una visita a su parte más antigua! Te recomendamos empezar la visita desdeIl Vittoriano,monumento a Víctor Manuel II, que brinda una vistas estupendas del conjunto que conforma la antigua Roma: el Circo Massimo,el Foro Romano,el Coliseo, el Arco de Constantino, el Foro de Augusto y la siempre impresionante Columna de Trajano. Si buscas una experiencia un poco especial, te animamos a realizar un paseo por el foro romano coincidiendo justo con el atardecer, la magia está asegurada. Y si lo que buscas es algo de recogimiento, acércate hasta la pequeñaiglesia de San Bonaventura al Palatino,todo un remanso de paz.

Tras tantas emociones, lo mejor es acercarse al bello barrio del Trastevere y gozar de su amplia oferta gastronómica y de ocio nocturno. Primero se puede abrir apetito tomando un vino en el Ombre Rosse Caffe (Piazza S.Egidio 12,13), para acabar cenando auténtica comida italiana sin sofisticaciones en el Da Lucia (Vicolo del Mattonato 2).

Segunda jornada: Vaticano, plazas, palazzi, callejeo y muchas iglesias

Seas o no religioso, no puedes irte de Roma sin visitar la Basílica de San Pedro. Por mucho que la hayamos visto en fotografías y en la televisión, hasta que uno no se encuentra en la plaza de San Pedro no se percata de las dimensiones de este monumento. Una vez en el interior, todo resulta abrumador, desde la cúpula, diseñada por Miguel Ángel, la increíble decoración en mármol, el Baldaquino de Bernini culminando el altar mayor, y los conjuntos escultóricos como laPietàde Miguel Ángel o tumba de Urbano VIII de Bernini. Al que madruga Dios le ayuda, así que te recomendamos ir temprano para evitar colas.

Muy cerca de San Pedro se encuentran los Museos Vaticanos, que entre sus múltiples obras albergan otra de las joyas de la Historia del Arte,la Capilla Sixtina. Te recomendamos ir con reserva previa para evitar las esperas. Si lo que te va es la marcha, no dejes de ver lasStanze di Raffaello, cuatro estancias decoradas con frescos de Rafael por las que merece la pena alargar la visita.

Tras esta doble sesión, el cuerpo y la mente necesitarán de un buen respiro. Lo mejor, acercarse hasta Castel San Angelo, cruzar el río Tíber y retomar energías en alguno de los locales que encontrarás en la trendy Vía dei Coronari. Nuestra recomendación, probar las tablas de tablas de embutidos y quesos italianos de Fresco Coronari.

Una vez descansado, llega el momento de acercarse hasta laPiazza Navona,en la que se encuentra lo originalFontana dei Quattro Fiumide Bernini, y laChiesa de chiesa di Sant'Agnese in Agonede Borromini. No muy lejos te toparás con elPanteón de Agripa,otromustde la arquitectura romana. Construido entre los años 118 y 125 d.C., su cúpula no te dejará impasible. Por cierto, una vez en su interior no dudes en acercarte hasta la tumba de Rafael, que se encuentra en una de las capillas. Culminando este recorrido estaría otro de los clásicos de esta ciudad, laFontana de Trevi.

Una buena manera de acabar tan intensa jornada es dando un paseo hasta el Campo dei Fiori, y perderse por las calles que rodean la Piazza Farnese. Se puede aprovechar para hacer una pausa en el Caffé Perú, para acabar rematando la faena cenando en elCul de Sac (Piazza di Pasquino, 73).

Tercera jornada: de picnic con los Borghese

Los jardines de la Villa Borghese son un perfecto punto y final a una escapada a la capital italiana. Pero antes de llegar a ellos aprovecha para recorrer la Vía del Baduino, haciendo una parada en la Piazza de Spagna y otra en la Piazza dei Popolo. Desde ahí toma el camino de ascenso hacia los jardines de Villa Borghese y aprovecha para disfrutar de la panorámica que hay de Roma en su parte más elevada. Culminando el recorrido por este magnífico parque lleno de estatuas y de espacio para el ocio está el Museo Borghese. En su interior te esperan las últimas joyas del viaje: los frescos con los que está ornamentado, las escultura de Bernini y su colección de pintura.

¿Listo para dejarte hechizar por la belleza de Roma? Consulta tu vueling aquí.

 

Texto e imágenes de ISABELYLUIS Comunicación

 

+ info

Cinco maravillas a menos de una hora de Roma

Cuando uno visita Roma le resulta casi imposible pensar que pueda haber algo más allá de esta espectacular ciudad, por no decir que es más que seguro que no tengas tiempo para planteártelo. Entre su extenso pasado romano, su excelencias renacentistas y su apabullante patrimonio barroco es difícil  imaginar que haya algo fuera de sus límites. Nada más lejos de la realidad, ya que sí, hay vida más allá de laCiudad eterna, ¡y qué vida!. Villas de veraneo, ciudades detenidas en el tiempo y refugios papales te esperan a menos de una hora de Roma, ¿te aventuras a conocerlos con nosotros?

Villa Adriana

Nuestra primera maravilla está en las afueras de Tívoli, a unos 45 minutos de Roma, y es una extraordinaria villa que sirvió de lugar de descanso a Adriano. Al igual que las clases más pudientes de Roma, este emperador buscó en los alrededores de la ciudad un lugar donde desconectar del ajetreo de la urbe. En su caso no se conformó con una simple casa de veraneo sino que fue más allá, ideando una “pequeña ciudad” en la que mandó reconstruir algunos de los edificios que había visto en sus viajes. Es el caso del Canopus, que es una copia de un santuario de Alejandría, o del Pecile que imita a un edificio de Atenas. El Teatro Marítimo es uno de los espacios más relevantes del conjunto, en el que hay una pequeña villa construida en una isla situada en medio de un lago artificial.

Villa de Este

En el centro de Tívoli está ubicada otra de las joyas de la zona, una villa renacentista que originariamente era un convento benedictino y que en el siglo XVI fue transformada en palacio por Hipólito II de Este, hijo de Lucrecia de Borgia. Además del edificio y sus estancias interiores finamente decoradas con frescos, destacan sus impresionantes jardines, que albergan la friolera de 500 fuentes. Entre ellas sobresalen una que consta de una hilera compuesta de cien fuentes, la Fuente de Neptuno, que cuenta con una espectacular cascada, y la fuente que tiene un órgano hidráulico que emite sonidos.

Villa Gregoriana

Muy cerca de la villa de Este se encuentra este fantástico parque realizado por encargo del Papa Gregorio XVI en 1835. Construido en el lecho del río Aniene, sobresale de él la gran cascada fruto de la desviación de éste para proteger la zona de inundaciones. Entre la exuberante vegetación que hay en la villa encontrarás restos arqueológicos como los del Templo de Vesta, construido en el siglo I a.C., además de unas estupendas vistas. 

Ostia Antica

Situada a 30 kilómetros de Roma, muy próxima a la desembocadura del río Tíber, se encuentran los restos de Ostia Antica, que antaño fue una importante ciudad portuaria. Fundada en el siglo IV a.C., fue un enclave comercial y defensivo muy relevante en la antigua Roma. Con la caída del Imperio Romano empezó su declive, y las continuas invasiones y una epidemia de malaria llevaron a que fuese abandonada por sus habitantes. Enterrada bajo los sedimentos del río durante siglos ha logrado llegar hasta nuestros días en bastante buen estado de conservación, aunque no tanto como Pompeya y Herculano. Recorriendo lo que queda de sus calles, templos, termas, casas y comercios no resulta difícil imaginar el esplendor que llegó a tener en el pasado. 

Frascati y Castel Gandolfo

En último lugar hemos escogido estas dos bellas localidades situadas en las Colinas Albanas, y que forman parte del conjunto de municipios conocidos como los Castelli Romani (Castillos de Roma). La pintoresca localidad de Frascati es célebre por su vino blanco y por las villas que se construyeron allí Papas, cardenales y nobles de Roma a partir del siglo XVI. Es el caso de la espectacular villa Aldobrandini, también conocida como Belvedere, diseñada por Giacomo della Porta y finalizada Carlo Maderno.

A orillas del lago Albano está ubicado Castel Gandolfo, que ante todo es conocido por albergar la residencia de verano del Papa. A pesar de que esta última no se puede visitar, merece la pena darse un paseo por su centro histórico y disfrutar de las vistas.  

Reserva tu Vueling a Roma, y anímate a ir más allá de sus límites visitando algunas de las propuestas que te acabamos de presentar.

Texto de Los Viajes de ISABELYLUIS

Imágenes de Aquilifer, Adrian Pingstone, M.Maselli, Alexander Mooi, CucombreLibre, Alessandro Malatesta, Polybert49, Sudika, MatthiasKabel

+ info

Vive el mundo salvaje

El pasado minero de Cantabria sigue presente en las 750 ha. de paisaje rojizo en el que se encuentra el Parque de la Naturaleza de Cabárceno. Situado a tan solo 15 Km. de la ciudad de Santander, su proximidad kilométrica a la urbe, es inversamente proporcional a la sensación de estar en otro lugar del planeta. Aquí viven en semi libertad un centenar de especies animales de los 5 continentes, desde elefantes africanos, gorilas o watusis hasta addax, llamas y leones marinos.

Los espacios al aire libre son generosos, además de tremendamente bellos. La flora sigue su ciclo durante las cuatro estaciones del año, así que puedes ver un parque distinto en primavera, verano, otoño o invierno. Se han aprovechado, las formaciones dejadas por el hombre durante la extracción de mineral de hierro en el Valle del Pisueña, para ubicar los recintos de Cabárceno. Se intenta que los animales vivan en un ambiente lo más natural posible y este lugar lo permite. Distintos miradores sirven para darte cuenta de la inmensidad del panorama y contemplar las manadas de asnos somalíes, búfalos de agua, cebras Grevi y avestruces. Los relieves kársticos caracterizados por la erosión caprichosa del agua permiten disfrutar del paisaje y la contemplación de los diferentes animales.

En el parque se deja que la naturaleza siga su camino, hay peleas entre miembros de la misma especie, épocas de celo y machos dominantes. El hombre sólo interviene en caso de enfermedad, heridas, peligro en la vida de algún ejemplar y para dar alimento a los animales. Ese es el momento que aprovecha el parque para ofrecer la Visita Salvaje. Un único coche con 4 ocupantes al día recorrerá, en horario de 10 de la mañana a 5 de la tarde, diversos espacios donde viven los rinocerontes, los osos o las jirafas (cuesta 400 € e incluye el almuerzo en el restaurante del parque). De la mano de un cuidador se tendrá la oportunidad de tocar, dar de comer y conocer sin intermediarios las cualidades, características y curiosidades de cada animal o especie.

Es así como te enteras que las tres elegantes jirafas que corren hacia ti porque te ven llegar con un saco de zanahorias, son las tres macho y que se llevan muy bien precisamente porque no hay ninguna hembra. O te enteras de la sorprendente historia de Jums, un elefante africano de 39 años que vino de Inglaterra y que reconoció a uno de sus hijos que vive en Cabárceno.

En la Visita Salvaje además, se explica al visitante los rituales y entrenamientos que se realizan con alguno de los animales, para acostumbrarlos a la presencia del hombre con la única intención de que, llegado el momento, el veterinario pueda curarles una herida o se les pueda hacer un chequeo de salud. Es una tarea difícil, los animales salvajes no pierden su instinto de supervivencia y recelan de los humanos, pero es satisfactorio ver como el trabajo diario y el cariño por los animales, así como una manzana o una zanahoria, ¡hacen el milagro!

La rutina diaria de las especies no se ve afectada por los afortunados participantes de la Visita Salvaje (hay lista de espera, así que hay que reservarla con tiempo) se sigue el horario de comida al que están acostumbrados. En el único recinto donde no se puede bajar del coche es en el recinto de los osos pardos. A través de la ventanilla del coche se ve perfectamente y a escasos metros, a un puñado de osos saboreando un trozo de pollo o pan. Hay aproximadamente 70 ejemplares en un espacio de 35 ha. que aunque no se recorren en su totalidad en el coche, te dan una idea de lo grande que es el parque.

Los lagos naturales del Parque de Cabárceno son también una de sus características y para los 14 elefantes poderse bañar en 8 metros de profundidad es toda una delicia. Dicen que aquí se encuentra el mejor recinto de hipopótamos del mundo, el Lago Sexta que muy pronto se podrá sobrevolar en teleférico (previsto para marzo del 2016).

La entrada normal de un día completo en el Parque de la Naturaleza de Cabárceno cuesta 25 €, 15 € para los más pequeños (aunque te recomiendo consultar todos los tipos de entrada ya que hay descuentos para familias y “amigos” de Cabárceno). La entrada te da la posibilidad de disfrutar en tu propio coche de los 20 Km. de caminos que recorren todas las áreas, respetando la velocidad y las medidas de seguridad, pero lamentablemente en este caso no está permitido ni tocar, ni dar de comer a los animales (primero por seguridad ya que no vas acompañado de personal que te indique como hacerlo y segundo porque cada animal sigue una dieta con un horario determinado). En la entrada te darán un mapa para ubicarte, hay rutas señaladas y tienes la posibilidad de descargarte una aplicación para tus dispositivos móviles con información de lo que estás viendo en cada momento. Tienes a tu disposición zonas de picnic por si quieres disfrutar de tu propia comida a tu ritmo, pero también dispones de cafeterías, restaurantes, tiendas de regalos o la posibilidad de salir del recinto y volver a entrar más tarde. También está permitido entrar con auto caravanas.

El día se te pasará volando entre los gamos, gorilas, ciervos, camellos y las exhibiciones de las aves rapaces y sus técnicas de vuelo o los juegos de los leones marinos (que no te escuchen llamarles focas que tienen orejas y les molesta que los confundan). No importa la edad que tengas, si te gustan los animales, aquí disfrutarás de ellos.

¿A qué esperas para descubrirlo? Consulta nuestros vuelos a Santander aquí.

 

Texto e imágenes de Planeta Dunia

 

+ info