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DESTINO IDEAL DE FIN DE SEMANA: A CORUÑA

2 días en A Coruña es todo lo que necesitas para disfrutar de su buen rollo y de su gastronomía.

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BALEARES EN OTOÑO E INVIERNO, MUCHO MÁS QUE SOL Y PLAYA

Museos, faros, arte contemporáneo, torres de vigilancia, castillos, murallas... Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera son mucho más que un destino de sol y playa, perfectas para cualquier época del año, sobre todo si buscas desconectar en un lugar tranquilo.

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De cervezas artesanas por Barcelona

La Cervesera Artesana
Tal nombre puede parecer obvio, pero lo lucen con legitimidad, puesto que esta cervecería fue de las primeras en colgar el rótulo de artesana en la ciudad. Desde sus ventanales, podéis observar cómo elaboran los siete tipos de cerveza Iberian —la marca de la primera microcervecería barcelonesa, de 1993— que sirven en el local, desde una stout hasta una reconocida cerveza de especias. Pidieron a sus clientes que eligieran en Facebook cuál debía ser su nueva variedad, y la sugerencia ganadora fue una cerveza de guindilla. En ello están. Pero tienen muchas más. El local, en la parte baja de Gràcia, rebosa siempre de buen ambiente.

Homo Sibaris
Guillem Laporta es uno de los activistas cerveceros con más pedigrí de Barcelona, y su cervecería, Homo Sibaris, es una prueba de su conocimiento acumulado… y una de las cervecerías más acogedoras de la ciudad. Ubicada en la pintoresca plaza Osca, en Sants, recientemente ha ampliado su número de tiradores a catorce. De sus caños brotan cervezas elaboradas por el propio Guillem (¡acaba de preparar una nueva bitter que dará que hablar!) junto con otras birras artesanas de todo el mundo dificilísimas de encontrar. Sentaos en sus mesitas o en su terraza, estudiad la carta que os van a pasar, preguntad al personal, y dejaos aconsejar. Siempre aciertan.

Biercab
Cuando Manuel Baltasar pensaba qué tipo de cervecería quería abrir con sus amigos, entendió que la buena compañía era un elemento fundamental. Buena compañía en el proyecto —entre los socios hay un distribuïdor de cervezas, una cervecera artesana de Navarra (Naparbier) y un maestro cervecero de origen belga, Sven Bosch— y buena compañía en las mesas de este local del centro del Eixample. La carta de tapas del BierCab está pensada para que el acompañamiento con la cerveza funcione. El chef Ronald Garcia prepara platos, como el cebiche de corvina con leche de tigre o el sashimi de corvina con salsa de ají amarillo, que merecen ser degustados incluso por los no cerveceros. Eso sí, ir al BierCab y no probar ninguna cerveza es de juzgado de guardia. Tienen más de 600 y muchas son catalanas, visto que en este territorio la fiebre por la cerveza artesana está a la orden del día. "Lo mejor de aquí es que todo el mundo puede encontrar su estilo de cerveza", promete Manuel.

Blacklab & Kitchen
Jing Cheng y Matt Bader se conocieron estudiando arquitectura en Chicago y, cuando se graduaron, se instalaron en Barcelona. Al cabo de unos años, convirtieron su pasión en profesión y se lanzaron a montar una brewhouse en el Palau de Mar de la Barceloneta. Todo recuerda allí lo que les gustaba de EEUU: las cervezas naturales que elabora Matt, la cocina —ofrecen hamburguesas, sándwiches y sopas, pero les gusta aconsejar las alitas de pollo y los buns de panceta— e, incluso, los conciertos de las noches de sábado. Comeréis y beberéis rodeados de los depósitos donde fermentan sus propias cervezas, de mil estilos diferentes donde siempre hay alguna creación nueva.

Abirradero
Los cerveceros artesanos tienen la gracia de que lo son por una vocación propia y más o menos tardía. El triunvirato del Abirradero, en el Poble-sec, lo conforman un antiguo editor —Nereo Garbin—, un informático —Daniel Fermún—y un licenciado en telecos —Ivò Castells—. La mitad de la carta que ofrecen es de cervezas de creación propia, algunas de estilos rarísimos. Con la ayuda del periodista Sergi Bayó, han adaptado, incluso, la tabla periódica de los elementos a la cerveza para que los neófitos podamos descubrir la diversidad infinita de este mundo. Acompañados de tapas pensadas para maridar bien con la bebida, una cena en Abirradero nos va a revelar las infinitas posibilidades gastronómicas de la cerveza.

Reserva tu Vueling a Barcelona y anímate a saborear las mejores cervezas artesanas de la ciudad.

Texto de Josep Sucarrats de Gastronomistas

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Mulhouse la gran desconocida de Alsacia

Dos ciudades alsacianas acaparan la mayoría de visitas: Estrasburgo, sin duda una de las urbes más bonitas de Francia, y Colmar, la capital vinícola de esta zona. Pero si hay una gran olvidada en la nueva región del Gran Este, ésta es Mulhouse una antigua república independiente situada en un vértice en el que confluyen tres países europeos: Francia, Alemania y Suiza. Es quizás por esta ubicación privilegiada que Mulhouse es en la actualidad una de las poblaciones francesas con mayor proyección cultural y creativa gracias en parte a la importancia que tuvo en el siglo XIX el sector textil que la ha dotado de un interesante patrimonio industrial.

Mulhouse es Ciudad de Arte y de Historia, primera población alsaciana en recibir esta distinción, y uno de sus puntos de referencia es la plaza de la Réunion, su centro histórico, muy fácilmente reconocible por su antiguo Ayuntamiento pintado en tono rosado. En este lugar se alza el templo protestante de Saint-Étienne, a cuyo campanario se puede subir previa petición y descubrir unas vistas impresionantes de la ciudad.

Mulhouse fue uno de los primeros núcleos industriales de Francia donde sobresalió la industria textil. Muestra de este pasado son el Museo de la Impresión de Telas, que acoge cada año una exposición temática vinculada siempre a un diseñador conocido, o el Parque de Wesserling – Ecomuseo Textil en el que se hacen visitas teatralizadas y muestras de modistos. Mención aparte merecen los ejemplos de arquitectura industrial (antiguas fábricas de ladrillo rehabilitadas), de street art y de arte contemporáneo que hay por el centro de la ciudad.

Otro de los lugares a visitar es la Cité de l’Automobile (Collection Schlumpf), ubicada a unos cinco minutos del centro. Este espacio, considerado uno de los principales museos del automóvil del mundo, reúne más de 400 vehículos y en él destaca una más que importante colección dedicada a Bugatti. La Ciudad del Automóvil, que está dividida en cinco espacios diferenciados, es un verdadero museo interactivo en el que se proyectan interesantes audiovisuales sobre la industria del motor, además de tener varios simuladores con los que experimentar las sensaciones que tiene un piloto de carreras.

A las afueras de Mulhouse, en la localidad de Ungersheim, se encuentra el Ecomuseo de Alsacia, el más importante de Francia de este tipo. Es ideal para ir en familia porque los niños pequeños se lo pasarán fenomenal. Aquí tanto se puede saber más de las tradiciones regionales de Alsacia como conocer, por ejemplo, cómo eran las antiguas escuelas de esta región o cuáles eran los oficios más importantes que se desarrollaron, entre los que destacaban los herreros, los carpinteros de carros o los alfareros. También es curioso ver cómo se destilaban por aquel entonces los aguardientes locales o cómo se cocinaba. Además se pueden degustar recetas tradicionales y auténticas como la gelatina de apio, las patatas con ortigas, o el sorbete de albahaca.  

Por último, para probar la gastronomía alsaciana os recomendamos que os dirijáis a un winstub, que es el equivalente al pub en Alsacia (el Restaurante Le Cellier es una opción perfecta), donde se pueden degustar especialidades locales como el fleischschnakas, una exquisita carne guisada envuelta en una pasta de harina, el flammkuchen o tarte flambée, una fina masa de pan sencilla sobre la que se colocan otros alimentos como cebolla cruda, panceta y nata líquida, o el chucrut, acompañadas por deliciosos vinos alsacianos. Y para salir por la noche la mejor opción es dirigirse a Le Gambrinus donde se respira muy buen ambiente y donde elaboran una excelente cerveza artesanal (Bière du Bollwerk).

Mulhouse es una ciudad perfecta para recorrer en un fin de semana. El aeropuerto internacional Basilea-Mulhouse-Friburgo, que comparten Francia, Alemania y Suiza, está a tan solo 30 minutos del centro. Más información sobre los vuelos aquí.

Texto de Tusdestinos.net

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