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MALTA, PARAÍSO DEL DEPORTE: BUCEO, KAYAK, CICLISMO Y MUCHO MÁS

Malta no es solo un archipiélago pintoresco donde disfrutar de un clima privilegiado y de múltiples atracciones históricas y arquitectónicas, sino también el lugar ideal para hacer deporte, desde buceo a ciclismo o kayak.

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10 IDEAS DE ESCAPADAS EN PRIMAVERA CON NIÑOS

Una selección de países family welcome en Europa perfectos para visitar con niños esta primavera, de la mano de Mammaproof.

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Tres rutas imprescindibles para practicar senderismo en La Palma

La Palma es una de las islas más bonitas de todo el Atlántico, a diferencia de sus hermanas del archipiélago canario, cuenta con un riquísimo ecosistema en el que se reúnen excepcionales valores naturales que hacen de ella una isla paradisíaca. La fauna y la flora autóctonas forman parte de sus espectaculares paisajes que destacan por su diversidad. Su cuidado entorno natural permite disfrutar de unas vacaciones de forma alternativa y divertida, realizando actividades en contacto con la naturaleza y practicando todo tipo de deportes.

Sin duda La Palma es un edén para el caminante y ofrece un gran número de opciones para practicar senderismo. Antes de emprender la ruta os recomendamos consultar los partes meteorológicos, no caminar nunca solo, dejar constancia a alguien de la ruta que se va a hacer así como de la hora de regreso, llevar una pequeña mochila individual con algo de ropa de abrigo un chubasquero, comida y agua abundante, no olvidar elementos fundamentales como gorro, crema solar y gafas de sol, llevar siempre un teléfono móvil con la batería cargada, un mapa y, a poder ser, una brújula, respetar la señalización del sendero y no salir de sus márgenes y sobretodo equiparse con botas de trekking o similares. También te recomendamos que consultes tanto el perfil como la distancia y la duración de la ruta en la web www.senderosdelapalma.com. Entre todas las rutas posibles os hemos hecho una selección de tres con diferentes niveles de dificultad que, además, te permitirán admirar la ya citada diversidad de paisajes de la Isla Bonita: y sobretodo equiparse con botas de trekking o similares. Entre todas las rutas posibles os hemos hecho una selección de tres con diferentes niveles de dificultad:

Puerto de Tazacorte – Roque de Los Muchachos

Este itinerario cuenta con una dificultad alta, y está pensado para ser practicada por deportistas experimentados. Su principal dificultad es sobretodo su gran desnivel. Se recomienda no realizarlo en época de verano o días calurosos y en invierno tener en cuenta que discurre por zonas altas, siendo posible, incluso, encontrar nieve y hielo en el Roque de los Muchachos. Se trata de una ruta con una distancia total de 17,16 Km, con un desnivel ascendente acumulado de 2.600 m. La salida se hace desde el Puerto de Tazacorte, al nivel del mar. Y a partir de aquí empieza un ascenso progresivo que nos lleva a El Time (Km 3.8). Luego pasamos por Hoya Grande y por el Risco de las Pareditas. Aquí os recomendamos hacer una parada para reponer fuerzas mientras disfrutáis del maravilloso paisaje, a una altura de 1.500 m. Desde aquí quedan casi 7 km. para alcanzar la conclusión de la ruta. Pero antes pasaremos por Hoya del Estrabito, Pinos Gachos y la Degollada de Las Palomas, donde la pendiente empieza a suavizarse hasta el final. A destacar de esta ruta las impresionantes vistas sobre el Barranco de las Angustias y las que se obtienen desde el Roque de los Muchachos sobre la Caldera de Taburiente.

Cubo de la Galga

Se trata de una ruta de nivel bajo, muy propicia para hacerla con niños, a través del PR LP 5.1 El recorrido se inicia y se acaba en La Galga, Puntallana, en la caseta de información de Medioambiente que se ve a lo largo de la carretera LP 1, una vez atravesado el túnel que se encuentra tras pasar el barrio de La Galga, en dirección San Andrés y Sauces. La distancia total es de 12, 4 km, con un desnivel acumulado de tan solo 750 metros, y el tiempo estimado para realizar ida y vuelta es de 3 horas. La ruta transcurre por parte del Parque Natural de Las Nieves, un espacio natural protegido tan espectacular que no permite que apagues tu cámara fotográfica. Tienes dos opciones: o bien entrar hasta el mismo Cubo de la Galga y regresar o bien subir al mirador de Somada Alta para luego volver, o continuar el camino hasta la iglesia de San Bartolomé para, después, seguir por la carretera hasta el punto en el que dejaste el vehículo. La primera de ellas es un recorrido circular por la zona más vistosa e interesante del sendero: la laurisilva del Cubo de La Galga, que es una selva templada o bosque laurifolio, propio de la Macaronesia y que en la Isla Bonita sólo se encuentra en la zona Noreste de La Palma, en las Islas Canarias. Se caracteriza por sus grandes árboles, frondosos y espectaculares helechos y vegetación de laurisilva. Tendrás la sensación de estar en una selva  tropical. Presta especial atención al sonido de los pájaros y al tímido rayo de sol que intenta penetrar en la espesura. Todo un espectáculo con todas las variedades de verde. La segunda es una continuación de la anterior subiendo hasta el Mirador de Somada Alta desde el que obtendrás impresionantes vistas sobre la zona para luego descender de la manera explicada.

Valencia– Pico Bejenado - Valencia

Y para poder ir en familia os recomendamos este paseo. Se trata de un sendero circular, que si se hace entero es de, 10 kilómetros pasando de un desnivel de 1.100 a 1.800 metros. El tiempo estimado para realizarlo es de 3 horas La ruta transcurre En los límites del Parque Nacional de La Caldera de Taburiente. Podemos llegar en coche hasta el final de la pista del barrio de Valencia. Desde allí veremos la señalización del sendero PR LP 13.3 que nos lleva al Bejenado. Una hora y media de ascensión en zigzag entre pinos nos llevará a la cumbre de este pico. Soberbias son las vistas que desde allí se obtendrán tanto hacia el interior del Parque Nacional de la Caldera de Taburiente como hacia la Ruta de los Volcanes y todo el Valle de Aridane. Ah, no te olvides firmar en el libro de visitas que encontrarás allí mismo. Después la vuelta será todo un bálsamo, ya que es en bajada hasta el punto de inicio. Seguro que llegamos con incontenibles ganas de comer y reponer fuerzas.

Éstas tan solo han sido tres rutas de las muchas posibles –con diferentes niveles de dificultad- con las que poder extraer el máximo rendimiento a la diversidad paisajística de esta isla, con propuestas que pasan por los sitios más emblemáticos: Pinar, Parque Nacional, Laurisilva, Puerto Tazacorte, volcanes, dragos, pueblecitos por los que no ha pasado el tiempo, almendros en flor, costas acantiladas, etc. Más información en el Patronato de Turismo de La Palma.

¿A qué esperas para descubrir La Palma, la Isla Bonita? Consulta nuestros vuelos aquí.

Texto y fotos del Patronato de Turismo de La Palma

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Hedonismo de agua dulce la fiebre del baño en Zúrich

Es un día cálido en Zúrich. Estamos a las puertas de verano. Muchos locales han salido a la calle con ropa de baño bajo el brazo. Y es que la burguesa Zúrich, afincada en el podio de las ciudades con mejor calidad de vida del mundo, no sólo exhibe un aplastante poder económico, una belleza de postal, y un orgullo nacional por la puntualidad de sus transportes. Zúrich es, por encima de todo, el paraíso de los “Badis”, nombre afectuoso con el que denominan a los baños públicos al aire libre que se extienden por toda la ciudad a orillas de los ríos Limmat y Sihl y del Zürichsee (lago Zúrich); un álter ego de agua dulce que renace año tras año cuando las temperaturas alcanzan las cotas más altas.

Be Water My Friend!

Cinco minutos bastan para darse cuenta que el agua aquí juega un papel protagonista. La mantienen limpia, la exhiben, y le rinden culto. No solo estamos ante la ciudad con más fuentes de agua potable del mundo, unas 1200, sino que además su calidad es inmejorable y su sabor está a la altura de las aguas minerales gourmet.

Con una treintena de instalaciones de baño y casi veinte piscinas al aire libre, ninguna otra ciudad en Europa ostenta tal concentración de baños públicos por cápita. Abiertos a diario de mayo a septiembre, desde la salida a la puesta de sol, los Badis son el epicentro de la vida social. Con los años cada uno ha desarrollado su personalidad, y los hay para todos los públicos y bolsillos. ¡Y todavía hay más! Cuando cae la noche un gran número de instalaciones cobran una nueva vida y se transforman en Badi-Bars, ofreciendo bebidas, cenas, proyecciones de películas y música hasta altas horas de la madrugada.

Animados por el tamaño mediano de esta metrópolis a pequeña escala, y decididos a ahorrar unos francos en transporte, nos dirigimos a alquilar una bici en Züri rollt, el servicio municipal gratuito, donde dejando un depósito de 20 francos puedes disfrutar de la ciudad sobre ruedas. Bajo el lema Do As The Locals Do empezamos el tour.

¡Los romanos se bañaban aquí!

La tradición del baño en Zúrich no es una moda reciente. Su historia se remonta a hace 2000 años, cuando los romanos fundaron los primeros baños públicos en la antigua Turicum -nombre latino de la actual Zürich. Las ruinas de Thermengasse, en pleno centro histórico, todavía se pueden visitar y vienen acompañadas por información detallada de esta tradición ancestral.

Pero no es hasta principios del siglo XIX que la escena bañista eclosiona y los Badis empiezan a colonizar la ciudad. Lo que en un principio surge como una alternativa a equipar las casas con agua corriente, pronto se extiende como la pólvora, y hacia el 1900 ya encontramos 20 baños públicos, eso sí, ¡prudentemente separados por sexos!

Ante tal panorama no es de extrañar que bañarse al aire libre forme parte del ADN de Zúrich. Los locales rinden culto a sus Badis, y los visitantes pronto encuentran su lugar entre una oferta más que sexy.

Mujeres y hombres, y viceversa

¡Nos vamos de paseo por las aguas tranquilas del centro histórico! El primer alto en el camino es el veterano Frauenbadi. Construido en 1837 a orillas del río Limmat y destinado exclusivamente a mujeres desde su fundación hasta hoy, no hay sitio para tomar el sol con mejores vistas de la Grossmünster, la imponente catedral. Reconstruido en estilo Art Nouveau, conserva todo el carácter de la Belle Époque, con un gran claustro de madera cercando la piscina, plataformas para broncearse y accesos a la transparentísima agua del río. Por la noche, este clásico Badi se transforma en el elegante Barfussbar, con música en vivo, noches literarias y danza, donde hombres y mujeres toman cócteles bajo una misma consigna: ir descalzos.

Y como los polos opuestos se atraen, a pocos minutos de allí nos topamos con el Flussbad Schanzengraben, su homólogo masculino, un oasis de tranquilidad reservado exclusivamente a hombres. Este encantador Badi es la instalación de baño más antigua de la ciudad y ha estado en funcionamiento desde 1864. Rodeado por los restos de las antiguas murallas, aquí las corrientes son lentas y nadar no supone un deporte de riesgo. Más allá de las horas de baño, el sitio cambia radicalmente de aspecto y se convierte en el Rimini Bar, un bar restaurante íntimo muy popular en verano, dónde mujeres y hombres se relajan en la zona chill-out mientras la comida se cuece en la barbacoa. El local, de un glamour discreto 100% Swiss style, es el rincón perfecto para picar y tomar algo al fresco, bailar al ritmo de los DJs invitados, y realizar compras en su  mercado semanal de diseñadores locales y ropa vintage.

Alpes, arena y deportes en Zürichsee

Tras un chapuzón en pleno centro nos dirigimos al lago donde bañarse en compañía de patos y cisnes. La historia del Zürichsee está estrechamente ligada a la historia de la ciudad. Los muelles y paseos que recorren sus orillas, inaugurados en 1887, supusieron la entrada de la ciudad en la era moderna; Zúrich ganaba así terreno al agua, dejando atrás la congestionada ciudad medieval.

En la orilla derecha, pasando por la Ópera y la emblemática Bellevueplatz, se halla el Badi más cool, el Seebad Utoquai. Bañarse en sus aguas es como viajar al siglo XIX. Abierto por primera vez en 1890, el histórico Badi es toda una institución en Zúrich. Partes del edificio original de madera siguen intactas, y su colección de piscinas es uno de los rincones más trendies de la ciudad. Áreas para hombres, mujeres y mixtas; accesos directos al lago, plataformas flotantes y terrazas para tomar el sol, todo ello maridado con gente guapa que toma copas, charla animadamente o se dirige a la zona de masajes. Si tienes hambre, el restaurante sirve platos y tapas con aromas mediterráneos. Aunque si lo que buscas es tranquilidad, aquí no la vas a encontrar. Los alrededores están muy concurridos por barcos, veleros y paddles hasta bien entrada la noche. Definitivamente the-place-to-be para los más hedonistas que desean atrapar los últimos rayos de sol antes que mueran en el lago.

Cambiamos de tercio y saltamos a la orilla izquierda. ¡Nos bañamos mirando a los Alpes en el Seebad Enge! Abierto todo el año, en verano se puede disfrutar de piscinas mixtas y plataformas flotantes dentro del lago, y de la sauna durante los meses más fríos. Aunque para ser sinceros, aquí mucho no se nada. Con sesiones de yoga, estética, técnicas de relajación y clases de Stand Up Paddle, este Badi es sobre todo un espacio social para treintañeros donde mostrar los últimos modelos en ropa de baño, mirar y ser visto. Los fines de semana se llena hasta arriba de jóvenes tomando brunchs. Por la noche el Badi no cierra y se pone en marcha la barbacoa y el bar con conciertos al aire libre, slams de poesía y cócteles.

¿Una playa de arena fina con sabor a Mediterráneo? Has llegado al Strandbad Mythenquai, un sitio ‘ideal para familias con niños’ de aguas poco profundas, césped verdísimo dónde extender la toalla, hacer un picnic o leer. Los más osados pueden tirarse desde su imponente torre de saltos con plataformas de 1, 3 y 5 metros y zambullirse en las aguas insultantemente cristalinas de este lago urbano.

Río abajo en Zürich West

¡Bienvenidos al paraíso del freestyle! Hemos llegado a Zúrich West, el barrio híper-creativo y un bastión tomado por los jóvenes más cool. Aquí todo vale, aunque si no quieres desentonar, tírate río abajo y déjate arrastrar por la corriente.

El Badi de los Badis es el Flussbad Oberer Letten, un espacio urbano inundando por bicis y grafitis a orillas del Limmat donde no hay reglas escritas; observa a los locales y juzga por ti mismo. Tanto si optas por tomar el sol en las plataformas, hacer un picnic, o refrescarte con un Spritz del Primitivo a la hora del apero -hacia las 5pm coincidiendo con el afterwork- asegúrate de que tu cuerpo está en plena forma y tu outfit acorde con las tendencias del momento. ¡Estás en pleno territorio hipster!. Si tienes calor, dejar tus ‘trastitos’ allí donde estés y salta al agua, tienes cuatrocientos metros de nado libre por delante. Por la noche es el momento del macropopular Panama Bar, que sirve comida y pincha música de baile en unas de las mejores fiestas de la ciudad.

Si todavía te queda un soplo de energía, sigue río abajo guiado por el colosal Silo, un mastodonte de hormigón inaugurado en 2016 que sirve como almacén de grano y es la segunda torre más alta de la ciudad. Justo a medio camino se interpone el Flussbad Unterer Letten. Aquí la corriente es más rápida, y prueba de ello son las hordas de jóvenes que peregrinan hasta allí con colchonetas y barcos hinchables para realizar la bajada. Los bañistas que saltan se abandonan a su suerte, dejándose llevar por la fuerza del agua; algunos luchan sin éxito a contracorriente, intentando avanzar río arriba, aunque pocos lo consiguen. Los que se han quedado en tierra charlan, beben vino, desempaquetan sus picnics, o descansan en el césped. ¡Ah! y en verano el Badi acoge dos semanas de cine independiente al aire libre.

Esta es la dolce vita de Zúrich, un microcosmos sorprendente para el turista no iniciado que alcanza su punto álgido durante la estación de baño. Si tienes pensado visitar la ciudad más grande de Suiza durante el verano reserva tu Vueling aquí.

Texto de Núria Gurina i Puig 

Fotos de Zürich Tourism/Caroline Minjolle; Tourism/Elisabeth Real; Zürich Tourism/Martin Rütschi; Roland Fischer; Núria Gurina

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