Recorriendo el condado de Wicklow
Si tienes la oportunidad de viajar a Dublín, te recomendamos que aproveches para cogerte unos días de más para realizar alguna excursión por sus alrededores, donde te esperan magníficos paisajes y pintorescas poblaciones. Si hace unos posts te recomendábamos coger el DART, que es el sistema ferroviario que recorre la costa de Dublín, para visitar algunos de sus bellos pueblos, hoy te proponemos una escapada a lcondado de Wicklow, que se encuentra situado al sur de la capital irlandesa. Y te preguntarás, ¿qué tiene de especial esta región para que estire mis vacaciones y le dedique un tiempo extra? Paseos por la naturaleza, leyendas celtas, lagos, cascadas, mansiones, patrimonio histórico y mucha magia, ¿cómo lo ves? Merece la pena, ¿no?. A continuación te damos algunas claves para recorrer la zona y te indicamos cuáles son los espacios que no debes dejar de visitar.
El “Jardín de Irlanda”
El espléndido Parque Nacional de las montañas deWicklow es un de los principales atractivos de este condado. Situado a apenas 30 kilómetros de Dublín, ocupa una extensión de unas 20.000 hectáreas. Conocido como el “Jardín de Irlanda”, por la dimensión, la variedad y la belleza de su vegetación, es el lugar de escapada favorito de los dublineses durante los fines de semana, ya sea para estar en contacto con la naturaleza o ya sea para la práctica de deportes como eltrekking, el ciclismo, la pesca, el rafting, etc.
En este gran espacio natural sobresalen las montañas de Wicklow, que lo atraviesan de norte a sur. El pico más alto es el monte Lugnaquilla, con 925 metros de altura, al que le siguen los montes de Mullaghcleevaun, con 847 metros, y el de Kippure con 757 metros. Otro de los elementos relevantes que encontrarás es el río Slaney, que transcurre entre estos montes unos 72 kilómetros, y lagos como el Lough Tay, también conocido como Guinness, ya que algunos terrenos del mismo pertenecen a la familia de tan popular cerveza.
La mejor forma de disfrutar de este precioso parque es perdiéndose por las carreteras que lo recorren, que te llevarán por las múltiples facetas que llega a adoptar su naturaleza. Una auténtico placer para la vista y una de las mejores formas de conocer la campiña irlandesa.
Atractivos históricos
Otro de los platos fuertes que encontrarás en la zona es algún que otro resto histórico, como es el caso de Glendalough, un conjunto monacal que está situado en las Wicklow Mountains. Fundado en el siglo VI por San Kevin, y construido en gran parte entre los siglos VIII y XII, ha conseguido llegar a nuestros tiempos, a pesar de los ataques recibidos por los vikingos y de los saqueos perpetuados por los ingleses en el pasado. Tal y como su nombre indica –Glendalough en gaélico significa valle de los dos lagos-, este conjunto histórico se encuentra ubicado en un valle en el que hay dos lagos: en el superior se encuentran la mayor parte de los edificios que se conservan; en el inferior, el número de restos es menor, pero son los de mayor antigüedad y están relacionados con la vida San Kevin. La combinación de las construcciones en piedra, en muchos de los casos medio derruidas, con el entorno natural en el que se encuentran ubicadas es absolutamente fantástico, justificando más que de sobras una excursión al mismo.
Otros puntos de interés del condado de Wicklow son algunas de sus mansiones, como es el caso de la Avondale House, lugar de nacimiento y hogar del líder político irlandés Charles Stewart Parnell, o de la Powerscourt House, de la que destacan sus jardines, concluidos entre 1858 y 1875, y unos de los más importantes de Irlanda.
Déjate sorprender por la magia de este maravilloso condado irlandés situado a menos de una hora de Dublín, ¡reserva tu Vueling ya!
Texto de Los Viajes de ISABELYLUIS
Imágenes de Claire Gribbin
+ info
Ruta por la Barcelona de la música
• Rumba Catalana. Este género musical fue desarrollado por la comunidad gitana de Barcelona a partir de los años 50 en los barrios del Raval (calle de la Cera), Gracia y Hostafrancs.
• El Teatre del Liceu y el Palau de la Música. Dos grandes templos barceloneses de la música donde se puede escuchar ópera y música clásica en un entorno privilegiado.
• El Día de la Música en Barcelona. El 21 de junio se celebra el día de la música con la participación de sellos discográficos y tiendas de música de la ciudad como BCore o Revolver.
• Sala Heliogábal. Sitio de referencia para la dinamización de la vida artística de Barcelona. En este local han tocado la mayoría de músicos de la escena barcelonesa.
• Serrat y el Poble Sec. Joan Manuel Serrat es conocido también con el sobrenombre de El noi del Poble Sec (‘el niño de Poble Sec’, su barrio natal). Serrat es uno de los artistas más internacionales que ha visto crecer la ciudad.
• Carmen Amaya. Una de las figuras más importantes del flamenco nació en el ya desaparecido Somorrostro, lo que es hoy en día la Barceloneta. En los jardines de Joan Brossa encontramos una estatua de la icónica cantaora y bailaora.
• Monolito a Antonio Machín en la Plaza Vicenç Martorell. En el Distrito de Ciutat Vella se recuerda al cantante de boleros considerado "El más cubano de los españoles y el más español de los cubanos".
• Pau Casals. Aunque fue nació en el Vendrell, con 13 años empezó a tocar en el Café Tost del barrio de Gracia tres horas cada noche. Pau Casals se convirtió en uno de los violonchelistas mejor considerado de todos los tiempos. Nombrado hijo adoptivo de Barcelona, fue también nominado para el Premio Nobel de la Paz y ganador de la Medalla de la Paz de las Naciones Unidas.
• El Paralelo: música y teatro. La famosa avenida del Paralelo fue el centro neurálgico del teatro y la fiesta barcelonesa durante muchos años. Una avenida repleta de teatros y salas de baile.
• Sala Apolo y Razzmatazz. Siguen siendo las salas de fiesta por excelencia de la ciudad, donde se programan conciertos a diario y se celebran fiestas para todos los gustos.
• Sónar y Primavera Sound. Son los dos festivales más internacionales y multitudinarios de Barcelona. El primero es un referente en el mundo de la electrónica, el segundo no cierra puertas a ningún estilo pero se centra en lo más moderno e independiente del sector musical.
• La Plaça Reial. Punto céntrico y emblemático, al lado de las Ramblas, con locales como el Jamboree donde se pueden ver el mejor jazz en directo, el Sidecar, el Ocaña o el Glaciar, las terrazas, la gente que deambula por la plaza, las palmeras. Todo en su conjunto dan un aire especial a este lugar.
• El Taller de Músics. Con su propio sello discográfico, taller de producción y club de jazz. Todo músico acaba pasando alguna vez por el Taller de Músics, ya sea para sumarse a una de las jam session o para aprender a tocar un instrumento, las opciones son infinitas.
• Bar Vinilo. Situado en el centro del barrio de Gracia, el vinilo es un bar donde podréis disfrutar de buena música y gran ambiente. Muy a menudo pasan por allí músicos y artistas.
• Calle Tallers. Durante muchos años ha sido la calle con más tiendas de discos e instrumentos de la ciudad. Hoy en día aún quedan algunas tiendas que siempre atraen a melómanos y músicos. Te apetece visitar Barcelona eh! Reserva aquí tus vuelos!
Ilustración: Mónica Hidalgo
Texto: Fran Arnaiz
Ai Weiwei aterriza en Viena
Ai Weiwei es sinónimo de controversia y polémica allá por donde pasa. Mientras que su faceta de activista le ha valido más de un titular en los medios de comunicación, sobre todo a raíz de sus problemas con el régimen de su país de origen, China, su faceta de artista también le ha llevado a ser el centro de atención en cada una de las exposiciones que inaugura por el trasfondo político y de denuncia que hay en sus obras. Si el año pasado era la Royal Academy de Londres la encargada de consagrarlo como el gran artista internacional que es, en esta ocasión le toca el turno a Viena que acoge hasta el 20 de noviembre algunos de sus últimos trabajos en la que ya es la mayor exposición que se ha hecho hasta el momento de Ai Weiwei en Austria.
Un templo en el museo
Bajo el título de translocation – transformation, en referencia a la metamorfosis resultante en personas y objetos sometidos a un cambio deliberado de lugar, migración o expulsión, se exhiben varias instalaciones de Ai Weiwei, repartidas en diversos espacios situados en los jardines del Belvedere. El núcleo central de la exposición, comisariada por Alfred Weidinger, se encuentra ubicado en el que fuera el antiguo pabellón de Austria en la Exposición Universal de 1958, y que en la actualidad se emplea como plataforma para la difusión del arte contemporáneo bajo el nombre de 21er Haus. En su interior podemos ver la pieza Wang Family Ancestral Hall, que bien seguro que no pasará desapercibida para el espectador. Esta pieza es un templo ancestral de la dinastía Ming, con una altura de 14 metros y que está compuesto por 1.300 piezas individuales. Este templo perteneció a la familia Wang, clan de mercaderes del té, que durante la Revolución Cultural China fue expulsada del país, quedando abandonado. Ai Weiwei lo compró hace un tiempo a un inversor, para transformarlo en lo que es ahora, una obra sacada fuera de contexto que convive y dialoga con otros entornos arquitectónicos.
En otro de los espacios elegidos para esta muestra, el estanque del Belvedere Superior, se puede ver la instalación F Lotus, con la que el artista chino quiere hacernos reflexionar sobre uno de los temas desgraciadamente en boga estos últimos años, como es la llegada de refugiados a Europa. Para la elaboración de esta pieza ha reunido 1005 chalecos salvavidas procedentes de las playas de Lesbos y empleados por los refugiados sirios en su periplo por el mar hasta su llegada a tierras europeas. Con ellos ha formado 201 anillos unidos de tal modo que recuerdan a una flor de loto, y en cuya estructura final acaban formando una granfen el agua.
Otra de las piezas que también se puede ver el estanque del Belvedere Superior es Circle of Animals/Zodiac Heads, que ya es un todo clásico en la obra de Ai Weiwei. Estas doce cabezas de bronce representan los símbolos del zodiaco del horóscopo chino y están inspiradas en la fuente-reloj del palacio de verano de Yuanming Yuan que fue arrasada en 1860 por los franceses y los británicos durante la Segunda Guerra del Opio, y cuyos tesoros (incluidas estas cabezas) fueron robados y aún no han sido retornados.
¿Con curiosidad por conocer de primera mano el trabajo de Ai Weiwei? Anímate a hacer una escapada a Viena, consulta tu Vueling aquí.
Texto de Los Viajes de ISABELYLUIS
+ infoIrresistible Turin
Capital de Piamonte, Turín es la primera capital histórica de Italia desde su unificación en 1861. Las encantadoras colinas verdes que rodean la ciudad fascinan a todo tipo de turistas. Por su privilegiada situada en el corazón de Europa, es fácil llegar a Turín, lo que la convierte en un destino perfecto para una escapada, así como una parada ineludible si te encuentras realizando un recorrido por Piamonte o Italia.
Museos para todos los gustos
Descubrirás lo sorprendente de la ciudad con sus más de 40 museos que abarcan desde la historia antigua a las artes contemporáneas, desde las ciencias naturales y ambientales hasta el “séptimo arte”, desde la historia del automóvil hasta la historia de la cultura culinaria. “Mole Antonelliana” – el edificio que constituye el símbolo de la ciudad, con sus 167 metros de altura- alberga el Museo del Cine. O el Museo Egipcio, con la puesta a punto que le realizó el oscarizado escenógrafo Dante Ferretti, sólo superado en importancia por el Museo Egipcio de el Cairo.
Lingotto, la antigua fábrica de FIAT, alberga la Pinacoteca Giovanni y Marella Agnelli, con obras de un valor inestimable de Canaletto, Modigliani, Balla y Matisse. Los amantes del arte del siglo XIX y el arte contemporáneo deben sin duda visitar el GAM – la Galería y arte Moderno y Contemporáneo Castillo de Rivoli. Y por último, pero no menos importante, es imprescindible una visita al Museo Nacional del Automóvil.
Residencias Reales. “Corona de las Delicias”
La dinastía de la Casa Saboya dejó magníficas residencias reales que forman parte del Patrimonio de la Humanidad conferido por la UNESCO. El Palacio Real y el Palacio Madama, que flanquean la majestuosa Piazza Castello, el castillo de Valentino, construido en el río Po, y algunos otros castillos que encontramos en los límites de la ciudad forman la “Corona de las Delicias”. Entre ellos, algunos de los más significativos son el Palacio Real de Venaria, los parques y jardines que rodean La Mandria y la residencia de caza Stupinigi.
¿Qué probar en Turín?
Un viaje a Turín es también viaje a través de la cultura alimentaria. El aperitivo aquí es una costumbre muy extendida: una copa de vino o un cóctel acompañan siempre a los aperitivos, las degustaciones o ensaladas. Aunque sea en alguno de los nuevos bares de moda, esta costumbre tiene un origen antiguo. Ten en cuenta que fue en Turín donde nació el vermut en 1757 y que todavía Martini & Rossi conserva su sede principal cerca de la ciudad.
Los cafés históricos, con ambiente de época, son lugares muy hermosos con tiendas de delicatessen en las que degustar productos como el Bicerin, la bebida tradicional de Turín elaborada a base de café, chocolate y crema – chocolate caliente con crema-, el sabayón -con sabor a licor-, y el “Gianduiotti” – elaborado a base de chocolate con avellanas-.
Imagen de Hpnx9420
¿Te han entrado ganas de ir a Turín? ¡Consulta aquí nuestros vuelos!
+ info