Vueling cumplió 15 años el pasado 1 de julio de 2019. Desde su primer vuelo quiso marcar una nueva manera de interpretar la historia de la aviación. Se presentó como compañía de nueva generación y primera que apostaba al 100% por Barcelona. Aun no estaba a la vista IAG, o ser líder en su casa, aunque ya se deseaba. Así fueron los primeros pasos de una compañía con dos aviones, poco más de 100 empleados y ganas de comerse el mundo.
El primer vuelo de Vueling
La historia viva de Vueling arranca a las siete y media de la mañana del primer día de julio de 2004. Un avión A320 con matrícula EC-IZD y nombre Barceloning despegó puntual desde el aeropuerto de El Prat con mucha ilusión a bordo y todos los asientos vendidos: 180 viajeros y seis tripulantes con destino a Ibiza.
Por entonces el Aeropuerto de Barcelona - El Prat contaba con tan solo dos pistas cruzadas. La entonces nueva, paralela a la principal y la más cercana al litoral, estaba a punto de estrenarse. La torre de control actual estaba edificándose y la terminal T1 era un proyecto al que aún le faltaban cinco años para estrenarse. Toda la actividad se concentraba en la actual T2, que aquel año llegó a los 24,5 millones de viajeros, menos de la mitad de los que pasaron por el aeropuerto en 2018.
Una plantilla de tan solo 120 personas
Vueling empezó a volar con una flota mínima: dos aviones y un personal ajustado a las necesidades de sus primeros pasos. Una plantilla de 120 personas entre tripulantes, personal de tierra y de oficinas conformaron el staff inicial de la casa en aquel verano de 2004, unos días en que la nave no tripulada Cassini entró en la órbita alrededor de Saturno, José Luis Rodríguez Zapatero llevaba pocas semanas como nuevo presidente del gobierno de España, un país que estaba viviendo una severa ola de calor y el mundo era atónito testigo de las escenas en que un tribunal especial juzgaba a un orgulloso Saddam Hussein, el que fuera poderoso líder iraquí durante casi 25 años.
El 1 de julio de 2004, día en que Vueling se puso en marcha, fue jueves. Aquella noche Phil Collins actuó en el Palau Sant Jordi en su gira de despedida de los escenarios. Una despedida que finalmente no fue tal: Collins sigue de gira 15 años más tarde de ese adiós. En el cine se estrenó Shrek 2; películas como Lady Killers, Troya o Harry Potter y el Prisionero de Azkaban triunfaban y la mucho más humilde Good Bye Lenin se mantenía muy bien en la cartelera, mientras que los dos aviones de la compañía unían diariamente Barcelona con Palma, París, Bruselas e Ibiza. Así fueron esos primeros días en el verano de 2004.
La primera compañía de Barcelona
Vueling nació, entre otras cosas, por una anomalía aeronáutica: a pesar de tener casi 25 millones de pasajeros al año, Barcelona no tenía ninguna línea aérea con base, sede y centro de operaciones en su aeropuerto. La oportunidad estaba ahí, a la vista de un mapa en el que se podía crecer exponencialmente. La ilusión y empeño de sus fundadores fue enorme, pero aún con la mayor de las ambiciones les hubiera sido imposible imaginar la fotografía actual de la aerolínea: la más grande de España en número de aviones y en pasajeros transportados. También líder absoluta en muchos aeropuertos importantes y miembro de peso dentro de International Airlines Group o IAG, grupo empresarial que integra a importantes compañías europeas como British Airways, Iberia, Aer Lingus y Level.
La fórmula de arranque fue sencilla: ofrecer un buen servicio, fresco y cercano a un precio muy ajustado, inspirado en empresas como la estadounidense, JetBlue, con la que hubo una estrecha vinculación en los primeros tiempos. Vueling arrancó autodenominándose como 'Compañía de Nueva Generación'. En esa línea, a muchos y muchas sorprendió en aquel 2004 el uso del ‘tú’ en lugar del ‘usted’ en las comunicaciones o el uso alterno de varias lenguas en las campañas publicitarias. También sorprendió ver por primera vez a pilotos de una compañía española con una primera uniformidad muy diferente a la clásica: corbata amarilla y pantalones en tono caqui. Detalles que marcaron la diferencia durante los primeros compases de la vida de esta aerolínea.
Quince años han dado para mucho... y este blog irá recordando estas y muchas cosas más. Feliz 15º aniversario y a por muchos, muchos más.